Si una cosa han demostrado Tamara Falcó e Íñigo Onieva durante su primer año de casados es que no se privan de nada. Prueba de ello, sus exclusivas vacaciones en Seychelles, con clases de cocina criolla y duchas "al fresco", incluidas. La pareja está pasando unos días de ensueño, no apto para todos los bolsillos, en el archipiélago africano.

Una escapada de lujo con toda la exclusividad del caso para la cual no han escatimado en gastos. Muy al contrario que la mayoría de los mortales, la marquesa de Griñón y su marido han elegido, no una habitación, sino una espectacular villa para hospedarse en su destino. El minichalet, que de mini tiene poco, no cuesta menos de 1.400 euros y puede alcanzar los 1.600 euros la pernocta según el día. Te lo mostramos en detalle. 

La escapada por todo lo alto y sin prescindir de lujos de Tamara Falcó e Íñigo Onieva

Lo suyo es una luna de miel perpetua. Tamara Falcó e Íñigo Onieva han hecho de su matrimonio la gran excusa para no parar quietos en España y regalarse multitud de viajes al extranjero. Como ya es costumbre en ellos, la pareja se ha marchado a disfrutar de un verano por todo lo alto en las islas Seychelles, donde no están escatimando en lujos y agasajos mutuos para hacer de la experiencia una de esas que jamás podrán olvidar. Desde que se dieron el 'sí, quiero' en julio de 2013, la hija de Isabel Preysler y el ahora empresario de la hostelería (recordemos que hace apenas unos meses Íñigo abrió su primer restaurante en la capital) eligen los mejores destinos y hospedajes para sus escapadas. Y no iba a ser menos durante su travesía al archipiélago africano. 

Ya de primeras, el matrimonio se trasladó al paraíso tropical en primera clase, como mostró la propia marquesa de Griñón en su cuenta oficial de Instagram, que es una oda a la exclusividad y el estilo de vida "demasiado ostentoso", como le han criticado varios de sus fans, solo al alcance de los más afortunados. Tamara Falcó e Íñigo Onieva pudieron dormir y reponer fuerzas dentro de su propio habitáculo independiente, reconvertida en habitación con cama, que remplaza a los incómodos y escuetos asientos del avión destinados al resto de pasajeros. Pero lo que les esperaba a su llegada a Seychelles supera con creces sus "asientos". 

Tamara Falcó durmiendo dentro del avión que le llevó, junto a Íñigo Onieva, a Seychelles

Tamara Falcó durmiendo dentro del avión que le llevó, junto a Íñigo Onieva, a Seychelles. REDES

El hotel cinco estrellas super lujo donde se hospeda la hija de Isabel Preysler y su marido

Como es habitual en ellos, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han tirado la casa por la ventana y han elegido una villa privada de lujo en el hotel Raffles Seychelles para hospedarse en las islas. Se trata de una auténtica casa de 125 metros cuadrados a la que no le falta absolutamente de nada para cubrir las necesidades de sus afortunados inquilinos. El espacio tiene capacidad para tres personas, con dos habitaciones adaptadas con camas king size y vistas espectaculares al mar o a una colina próxima, dependiendo de la villa. 

Ahora bien, ya sea una u otra, ninguna prescinde de su "pequeña" piscina privada, de 14 metros cuadrados, dispuesta en la amplia terraza, donde disfrutar de un bañito refrescante en la intimidad del hogar provisional. Un lujo del que, suponemos, ya habrán hecho uso la marquesa de Griñón y su marido. "Relájese en la tumbona al aire libre o la piscina. Disfrute una noche de ensueño bajo las estrellas", se puede leer en la descripción del hospedaje. La privacidad es una máxima del hotel, que además de terraza y piscina privada en cada uno de los 86 chalets de los que dispone, también cuenta con su propia playa privada. 

Al descubierto, el paraíso de la marquesa de Griñón e Íñigo Onieva

Por supuesto, la decoración de los espacios del Raffles Seychelles está cuidada al milímetro. Suelos de parqué en tonos dorados, cortinas blancas transparentes que se mueven con la brisa del océano Índico, baños con bañera hidromasaje... Todo para hacer las delicias de los clientes que, como Tamara Falcó e Íñigo Onieva pueden permitirse alojarse en un paraíso de estas características. Mira la galería de fotos que te mostramos a continuación y juzga por ti mismo: