Alejandra Rubio, muy triste, visita a María Teresa Campos

Con la mirada cabizbaja y semblante serio, así se dejaba ver Alejandra Rubio en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid. La nieta de María Teresa Campos acudía acompañada por su exnovio, Carlos Agüera. Ha evitado realizar declaraciones a la prensa y prefería entrar rápidamente al hospital para estar junto a su familia. En el interior permanecían su madre, Terelu Campos, su tía, Carmen Borrego y su prima, Rosa Almoguera, entre otros.

A petición de las hijas de María Teresa Campos, la Fundación Jiménez Díaz ha emitido un comunicado sobre el estado de salud de María Teresa Campos. Ingresó este mismo domingo, 3 de septiembre, aquejada de un cuadro de insuficiencia respiratoria aguda. "Su pronóstico es reservado, dentro de la gravedad". La familia se ha movilizado para estar a su lado en este delicado momento. Poco después del ingreso llegaban Rocío Carrasco y Fidel Albiac, amigos íntimos de la familia. El matrimonio arropaba a Terelu Campos quien también ha recibido la visita de su exmarido, Alejandro Rubio.

Preocupación por el estado de salud de María Teresa

Existe máxima preocupación por el estado de salud la comunicadora. Por el momento, el pronóstico es "reservado" dentro de la gravedad. Sus hijas han avisado a su círculo más íntimo, incluso a amigas con las que estaban distanciadas en esta última etapa. Este es el caso de Belén Rodríguez. La periodista agradecía la llamada y enseguida acudía al hospital a visitar a su gran maestra con la que trabajó durante años en el magacín de las mañanas de Telecinco.

La última etapa de María Teresa Campos ha estado marcada por su delicado estado de salud. Hace tan solo unos días, en el marco del cumpleños de Terelu, la colaboradora reconocía que estaba muy pendiente de su progenitora. "En estos momentos lo que nos toca es dar, hemos recibido mucho de ella y ahora tenemos que devolvérselo", explicaba. Por su parte, Carmen Borrego indicaba que no estaba para muchas celebraciones. "Hemos estado esta mañana con mi madre y ahora vamos a cenar tranquilas. Ninguno estamos para muchas fiestas, es un momento delicado y fastidiado en nuestras vidas, como le pasaría a cualquiera con su madre, ni más ni menos. Lo hemos dicho muchas veces, nuestra prioridad es ella".