El Rey Carlos frena su quimioterapia para probar un costoso tratamiento contra el cáncer

Ha pasado más de un año desde que el Rey Carlos tuvo que hacer pública una noticia que nunca hubiera deseado. Esta no era otra que el anuncio del cáncer que padece, y por el que ha tenido que permanecer más alejado de la Corona de lo que le hubiera gustado. El monarca se ha visto obligado a reducir su agenda oficial de manera considerable, y aunque es cierto que en sus reapariciones muestra una gran vitalidad, no pierde el contacto con sus médicos de cabecera para probar todo tipo de tratamientos y así curarse cuanto antes.

La terapia Gerson, el tratamiento alternativo a la quimioterapia por el que se ha decantado el Rey Carlos para frenar el cáncer

Así lo ha revelado Concha Calleja durante la tarde del domingo, 23 de marzo, en ‘Fiesta’. La experta en realeza ha recalcado que Carlos III habría pedido interrumpir el tratamiento de quimioterapia para someterse a otros alternativos en su lucha contra el cáncer: “Le han dicho los médicos que es peligroso, él ya lo defendió en 2004, se trata de un tratamiento que se llama terapia Gerson, tiene que ponerse durante tres semanas, cada día, un edema de café, una lavativa”, ha comentado.

Quizá teniendo en cuenta los efectos secundarios de la quimioterapia, el monarca haya optado por confiar en un método más natural, aunque quizá no tan eficaz: “Es una terapia que fue muy rompedora, no tiene base científica. Él mismo llegó a defender a una señora que tenía un cáncer terminal y se curó (…) Él le ha dicho a los médicos que quiere parar porque tiene que dejarlo para hacer este tratamiento alternativo, quiere hacerlo”, ha continuado Concha, dejando boquiabiertos a sus compañeros de ‘Fiesta’.

Sus palabras no han quedado ahí, y la experta ha revelado más detalles sobre este tratamiento: “Durante tres semanas cada día un enema de café, luego 13 zumos al día, el máximo de litros que pueda. Es una limpieza absoluta. Luego una inyección de extracto de bacalao y B12. El tratamiento le cuesta 4.900 euros por semana y 20.000 euros las inyecciones que van aparte”, ha añadido. Una decisión que quizá no siente del todo bien dentro del Reino Unido, sobre todo teniendo en cuenta su elevado coste y la probabilidad que existe de que no funcione según el Rey espera. 

El último movimiento del monarca británico y la Reina Camilla un año después del anuncio de cáncer de Kate Middleton

Por el momento, desde la Casa Real británica no se han hecho eco de esta drástica decisión tomada por su soberano. Tan solo reaparecieron a través de sus redes sociales hace apenas unas horas, justo cuando se cumplía un año del anuncio de cáncer de Kate Middleton. Lo hicieron para reivindicar los problemas ambientales que no solo atañen al Reino Unido, sino al resto del mundo. Para concienciar a la gente, anunciaron que a las 20:30 horas del pasado martes, 22 de marzo, se apagarían las luces del Palacio de Buckingham, Clarence House y el Castillo de Windsor en apoyo a WWF: “Es una iniciativa para concienciar sobre los problemas ambientales. Únete a nosotros durante 60 minutos y dona una hora por la Tierra”, escribían.

Este ha sido un gesto muy ahorrativo dentro del clan Windsor, para el que el 22 de marzo se ha convertido en un día para olvidar. Y es que, justo se cumplieron 365 días desde que uno de los miembros más queridos dentro de la familia, Kate Middleton, tomara la palabra en un vídeo para revelar la razón por la que se negaba a reaparecer públicamente durante tantas semanas: “Tengo cáncer y estoy en proceso de quimioterapia”, confesaba. 

Por suerte, la Princesa de Gales puede presumir de que su cáncer ya está en remisión, razón por la que, poco a poco, está haciéndose cargo de más compromisos oficiales que el año pasado. Sin ir más lejos, el pasado lunes, 17 de marzo, reaparecía en el cuartel de Wellington en Londres con motivo del Día de San Patricio. Ataviada con un total look verde y un broche prestado con un trébol dorado de tres hojas, la mujer del Príncipe Guillermo se convertía en el centro de atención de todas las miradas como coronel de la Guardia Inglesa.

Durante su visita al enclave en cuestión, Kate sacó a relucir su faceta más cercana con algunos de los allí presentes, e incluso llegó a brindar con una cerveza pinta. Mientras tanto, el Rey Carlos permanece más alejado de sus quehaceres como miembro de la primera línea de la Corona para dar la mayor importancia a su estado de salud. Por su parte, son la Reina Camilla y su primogénito quienes se están haciendo cargo de estas misiones, tanto dentro como fuera de sus fronteras.