El rey Carlos III y la reina Camilla continúan de viaje de Estado en Italia, donde celebraron, el pasado miércoles, su 20 aniversario de bodas. Un día más que especial para ambos en el que la soberana sorprendió a todos al volver a lucir su vestida de novia durante el evento que tenían organizado para la jornada. Un gesto de lo más simbólico que emocionó sobremanera a su marido, como ahora ha revelado la prensa británica.
Poco acostumbrada a hablar de sus intimidades, mucho menos de las que afectan o atañen al padre del príncipe Guillermo y Harry, Camilla se embarcó en una charla con los periodistas ahí presentes en la que se confesó como nunca sobre un detalle desconocido de su relación. La reina consorte se sinceró sobre el secreto que ha mantenido su romance con Carlos III a flote durante todos estos años, más allá de las dos décadas que llevan casados.
El secreto detrás de la relación de la Reina Camilla y el rey Carlos II según la soberana
Poco acostumbrados a los gestos cariñosos en público de la familia real británica a raíz del férreo protocolo al que están sujetos, la reina Camilla tuvo uno, más que significativo con su marido, para el que no necesitó ni besos ni abrazos ni carantoñas. Lo cierto es que nadie lo esperaba. La mujer de Carlos III vistió el mismo exacto abrigo y vestido de color marfil firmado por Anna Valentine y bordados de la King's Foundation que usó para su boda civil hace 20 años. Fue su personal manera de celebrar su aniversario con el Rey mientras continúan de viaje oficial por Italia, donde la pareja real se ha reunido en audiencia privada con el papa Francisco aquel mismo día.
Antes de encontrarse con su santidad, la Reina Camilla charló animadamente con un grupo de periodistas que cubren el viaje italiano de los reyes de Inglaterra. En un movimiento inédito, la soberana no tuvo ningún problema a la hora de compartir el secreto que, a su entender (y de quién sino), ha sido la clave para mantener su matrimonio durante dos décadas. Y, previo a ese sí, quiero, su polémica relación con Carlos III cuando no era rey que se remonta a hace más de 40.
Así lo ha desvelado 'The Mirror', desde donde aseguran que, al preguntarle directamente por ese detalle de su relación, la Reina Camilla no tuvo ningún reparo en contestar abiertamente. "¿Quién iba a creer que fueron 20 años? No sé, bueno, supongo que es solo una especie de amistad, en realidad. Riéndonos de las mismas cosas, siguiendo adelante con la vida. Supongo que hacer esto (señalando el compromiso) ocupa la mayor parte del tiempo", confesó de lo más animada, poniendo por delante de cualquier fórmula mágica el hecho de que, ante todo, ella y el padre de Guillermo y Harry son amigos.
El Rey Carlos y Camilla en Italia, ella vestida con su traje de novia.
Gtres
Del blanco al negro: la Reina Camilla se quita su vestido de novia para reunirse con el papa Francisco
Volviendo al gesto de la reina Camilla de lucir su vestido de novia el pasado miércoles, no es la primera vez que lo saca a pasear después de su boda. Como recuerda el citado medio británico, fue en junio de 2007, coincidiendo con la inauguración del Parlamento inglés, cuando la soberana apareció de lo más elegante con el dos piezas. Para la ocasión visitó, eso sí, unos zapatos y sombrero diferentes al de su especial ceremonia. Lo cierto es que Carlos y Camilla atraviesan un momento muy dulce en lo personal, que contrasta con la enfermedad del rey, quien todavía recibe tratamiento oncológico semanal para luchar contra el cáncer que padece del que se desconoce el tipo.
Tras la aparición estelar de los Reyes durante el día de su aniversario, se reunieron con el papa Francisco en audiencia privada y, como ha informado el Palacio de Buckingham, recibieron las bendiciones del pontífice, consciente de la importante fecha para ellos.
Los Reyes, Carlos y Camilla, junto al Papa.
Gtres
Siguiendo el protocolo del Vaticano, la Reina se quitó su vestido blanco nupcial y optó por un total look negro, que engalanó con un collar de perlas y un broche. De este encuentro solo ha trascendido una única imagen (la que te ofrecemos sobre estas líneas) en la que el papa, convaleciente, le coge la mano a Camilla, muy sonrientes ambos, mientras ella le agasaja con lo que parece una reverencia. Todo bajo la atenta mirada de Carlos III, que sonríe a su Santidad, sentado en una silla, al tiempo que sujeta una caja donde, es de prever, hay un obsequio para el anfitrión.
"Un momento especial para Sus Majestades cuando se reunieron ayer en privado con Su Santidad el Papa Francisco en el Vaticano. El Rey y la Reina se sintieron muy emocionados por las amables palabras del Papa sobre su 20° aniversario de bodas y se sintieron honrados de poder compartir sus mejores deseos con él en persona", ha compartido la casa real británica en sus redes sociales, junto a la histórica imagen de la Reina Camilla, el rey y el papa.