La Reina Camilla confiesa, ante la prensa británica, cuál es la gran motivación de Carlos III en su lucha contra el cáncer

Para Carlos III, los deberes y obligaciones propios de su papel como Rey de Inglaterra son prioritarios. Es por ello que, pese a estar inmerso en su tratamiento contra el cáncer, el monarca no tiene intención de abandonar su agenda oficial, ni mucho menos. Tanto es así, que hace apenas unos días, protagonizaba un viaje de Estado a Italia junto a su esposa, la Reina Camilla. Ahora, ha sido precisamente ella quien ha revelado cuál es la clave que da fuerza a su marido incluso en los peores momentos.

Teniendo en cuenta que el Rey Carlos estuvo hospitalizado hace unos días por los efectos secundarios propiciados por su tratamiento contra el cáncer, su mujer ha tomado la palabra. Tal y como ha indicado el medio británico ‘Hello!’, la Reina Camilla considera que el trabajo hace que su marido se encuentre mejor pese a las circunstancias: “Creo que ama su trabajo y lo sostiene (…) Cuando has estado enfermo y te estás recuperando, quieres hacer cada vez más. Ese es el problema. Eso es lo que le motiva: ayudar a los demás”, ha asegurado. 

"Ayudar a los demás" hace que el Rey Carlos se encuentre mejor en medio de su enfermedad, según Camilla

Con ella coincide también un alto funcionario del Palacio de Buckingham, que también se habría unido a la conversación de la Reina con el medio citado para asegurar que el monarca compagina su apretada agenda con su tratamiento contra tan terrible enfermedad. Y es que, pese a su estado de salud, el soberano está “decidido a marcar la diferencia”, y tiene claro que “le gusta” conocer gente, y por ende, hacer frente a sus compromisos oficiales.

Cabe destacar que, en medio de su recuperación por el cáncer que padece, el Rey Carlos también está teniendo que hacer frente a otras polémicas. Entre ellas, las que giran en torno a su relación con su hijo menor, el Príncipe Harry. Y es que, a raíz de su viaje de Estado a Italia, salieron a relucir ciertos detalles que dejaban entrever que, más allá de una reconciliación, la prioridad del monarca es la de atender todo aquello que tenga que ver con la Corona.

El medio italiano ‘Oggi’ hizo especial hincapié en lo que podría ser un desplante en toda regla por parte de Carlos III hacia su hijo, el Príncipe Harry. Este último aterrizaba en Londres el pasado domingo, 6 de abril. Pero su padre puso rumbo a Roma el lunes, 7 de abril, para dar así pistoletazo de salida a su viaje de Estado. Un movimiento con el que demostraba que, pese a llevar más de un año sin ver al duque de Sussex, su principal objetivo es el de hacer frente a los compromisos profesionales que le atañen como Rey de Inglaterra.

No obstante, el portal en cuestión aclaró que, teniendo en cuenta que los Reyes regresaban a Londres el jueves, 10 de abril, por la noche; lo más probable es que estuviera entre sus planes tener una reunión con el Príncipe Harry. Si algo parecía estar totalmente claro, es que este último no iba a reunirse con su hermano, el Príncipe Guillermo, con quien la situación parece ser más fría y distante que nunca.

El frente abierto del monarca británico con su hijo, el Príncipe Harry, en plena lucha contra el cáncer

Pese a que Carlos III haya podido aprovechar la visita de su hijo menor para reunirse con él, sí que ha preferido no interferir en su última batalla judicial. Y es que, el duque de Sussex ha cruzado el Atlántico para seguir el juicio sobre la protección que Scotland Yard le brindó tanto a él como a su familia, y que ahora se le quiere arrebatar. El Ministerio de Interior, y en concreto el Comité Ejecutivo para la Protección de la Familia Real y Figuras Públicas, decidieron en 2020 que el hijo menor de Lady Di debía tener un menor nivel de protección financiada por los contribuyentes durante sus visitas al Reino Unido, pues había abandonado La Firma y todo lo que ello conlleva.

Esta alternativa cayó como un jarro de agua fría sobre el Príncipe, que sigue luchando ante la Justicia para conservar la protección con la que contaba en un primer momento. Pero si finalmente las autoridades deciden quitársela, esto podría entorpecer, aún más si cabe, sus relaciones con los miembros del clan Windsor. Para Harry la prioridad es la seguridad no solo propia, sino de su mujer, Meghan Markle, y de sus hijos. Es por ello que si esta no está garantizada, viajarán en menor medida a su tierra natal, lo que propiciaría el distanciamiento definitivo con la Familia Real británica, con la que actualmente las relaciones son prácticamente nulas.