La Reina hachemita, de 48 años, es una de las mujeres más elegantes del mundo. Esto no es ninguna sorpresa. Pero lo más llamativo es que en cada aparición suya siempre consigue sorprendernos por su particular forma de entender el estilo. Esta es su última lección.
Con su marido y su primogénito
Aquí vemos a Rania charlando relajadamente con su marido, el rey Abdullah, y su hijo mayor, el príncipe heredero Hussein, poco antes de recibir en el palacio real de Ammán al presidente de Italia, Sergio Mattarella, y la hija de este, Laura, que ejerce como Primera Dama.
Rania lleva lo étnico a otro nivel.
Lo que Rania tiene que decir a los que critican sus estilismos.
Máxima y Rania: misma edad, diferente expresión.
Radiante de blanco
Rania de Jordania eligió para este encuentro un conjunto en blanco, impecable, en el que destacaban varias piezas de diversas firmas, pero con total coherencia entre ellas.
Un trench de organza de Lanvin
Para empezar, lució un trench de organza, con las mangas transparentes, que es una prenda ideal para la primavera. Es de la firma francesa Lanvin, no apta para todos los bolsillos, ya que cuesta alrededor de 2.600 €. Por debajo Rania llevaba un vestido blanco de manga larga, perfectamente "camuflado" bajo la fina gabardina, de Tibi, que cuesta unos 830 €.
Un bolso de Marni
Y seguimos. Los complementos para este estilismo tienen como protagonista el color amarillo. En el bolso colgado del hombro (una tendencia que está volviendo), de Marni (1.550 €); y los zapatos con puntera plateada y vinilo, de Dior (unos 1.200 €). El peinado de Rania, otro punto a favor, era un semirecogido con moñito y el resto de la melena suelta.
Complementos y joyas de alta gama
El toque final lo aportaban estas gafas con cristales degradados y unas bonitas joyas: los pendientes de oro y un collar con una pequeña estrella. Todo ello para brindarnos un look elegante y sofisticado, también carísimo, con el que Rania nos vuelve a conquistar.