La Reina de Holanda se encuentra de visita en Jordania para atender unos compromisos de carácter económico en calidad de embajadora de la ONU. Si durante sus actividades de ayer no hubo rastro de los Reyes hachemitas, hoy lo han 'arreglado' y las agendas han confluido para brindarnos otro cara a cara entre dos de nuestras royals favoritas: Máxima y Rania.
De camino a su cita
Máxima ha abandonado su hotel para dirigirse hacia el Palacio Real de Ammán, residencia oficial de Abdhullah y Rania de Jordania, quienes han invitado a su homónima.
Un efusivo encuentro
Este gesto de Máxima lo dice todo. Nada más verse con los Reyes ha estallado en una gran sonrisa seguida de los saludos hacia la pareja, y se ha dado dos besos con cada uno.
Dos besos a Rania
Aunque en la jornada anterior Máxima desarrolló un montón de citas, la mayoría con gente común de la calle, mujeres emprendedoras e incluso refugiados sirios, parecía ilógico que en algún momento no se viera con los monarcas de Jordania, siendo ella también Reina. Estas fotografías dejan patente que existe una gran sintonía entre ellos.
Cara a cara entre 'colegas'
Nos ha llamado más la atención el 'cara a cara' entre las damas. Siempre que dos Reinas se encuentran se analiza hasta el más mínimo detalle. Más allá de su cordialidad, los estilismos elegidos por ambas son muy diferentes, pero fieles a su estilo. Un vestido de gasa de lunares para Máxima (de Giambattista Valli) y un top con mangas largas y una falda midi de cintura alta para Rania.
Estrechando lazos
Las dos llevaban su larga melena suelta. Un punto en común para dos reinas que brillan cada una siempre en su estilo. Sin embargo, hemos de resaltar otra cuestión: sus rostros.
Tienen 47 y 48 años
Máxima tiene 47 años (cumplirá 48 el próximo 17 de mayo) y Rania tiene 48 años (ella cumple 49 el 31 de agosto). Es decir, que son casi de la misma quinta y se llevan menos de un año. Sin embargo, la diferencia de edad se refleja en sus caras de manera notable.
Retoques en los labios
Rania de Jordania se ha ido sometiendo a diferentes tratamientos estéticos a lo largo de los últimos años (incluida una operación de nariz en su juventud), por lo que su expresión ha variado ligeramente respecto al 'original'. A veces la aplicación de bótox y otros rellenos hace que sus pómulos resalten demasiado y sus ojos queden más pequeños y otras su boca llama la atención por su excesivo volumen. Ese es este caso.
Frente a naturalidad
Frente al rostro liso y aparentemente sin arrugas de Rania observamos el más natural de Máxima. Sus líneas de expresión están marcadas y sus pequitas no se ocultan en su tez. La reina holandesa está madurando con atractivo y normalidad y por ello nada en ella nos resulta raro.
Una charla informal
Tras los saludos y el posado ante la prensa, Abdullah y Rania se han sentado con su invitada para mantener una conversación informal. A buen seguro que Máxima les ha contado todo lo vivido en las calles de Ammán.
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