Estas fechas navideñas giran en gran parte entorno a la mesa. Las familias nos reunimos sentados en ellas para degustar juntos todo tipo de especialidades y delicias que, en muchos casos, solo se sirven en esta época. ¿Son muy distintas nuestras cenas de las de las familias reales? ¿Qué se sirve en los palacios de la realeza europea? ¿Tienen tradiciones que solo degusten en estas fiestas? Hoy viajamos por algunas de las casas reales europeas para descubrir que servirán en una noche tan especial como la Nochebuena.
La cena de nuestra familia real varía poco de año en año y suele estar compuesta por unos entrantes a base de jamón serrano de jabugo, salmón ahumado, pudín de marisco angulas y foie micuit acompañado de pequeñas tostaditas. Como primero un plato ligero pero nutritivo; sopa de almendras. El segundo es pavo asado con verduras acompañado de un puré elaborado a base de castañas. Los postres son un variado de turrones, mazapanes, polvorones, tartas heladas y fruta. Pero, ¿Qué cenan los royals más allá de nuestras fronteras?
Del menú afrancesado de los Windsor al sabor argentino de los Orange
En Sandringham, Palacio elegido por la Familia Real británica para pasar las navidades, el día de nochebuena y Navidad se da día libre al servicio, por lo que la cena del 24 y la comida del 25 suelen ser en formato buffet libre y suelen estar compuesto por platos fríos. Hace unos años se subastó la minuta de una de esas cenas donde se anunciaba, en francés, cada uno de los platos que conformaban este menú. Como entrantes, filete de ternera con timbales de verduras y legumbres, foie-grass, lengua de ternera estofada, jamón de york y pavo ahumado. Como primeros platos en el buffet de Sandringham se puede degustar corona de salmón ahumado en mousse, melón con jamón de Parma, ensalada de judías con rúcula, panaché de verduras con huevos de codorniz, ensalada de gayo y aguacates y ensalada de arroz. El segundo plato es plato único: pastel de berenjenas. Para los postres se suele servir alguna gelatina elaborada, tronco de navidad y una selección de galletitas alemanas típicas de estas fechas.
Por su parte, la Casa de Orange, o lo que es lo mismo, la Familia Real de los Países Bajos se decantan por aunar tradición y nuevas costumbres para conformar su cena de Nochebuena. Todo comienza degustando un plato típico holandés: una especia de gachas con salsa de caza elaborada a partir de carcasas de aves como las codornices o las perdices. El principal suele ser el tradicional pavo asado acompañado de verduras y patatas. El postre es el plato más especial del menú de los Orange y es que la Reina Máxima suele preparar uno de los dulces más típicos de su país: alfajores de maizena con dulce de leche. Además, ella misma ha compartido su receta en alguna ocasión en el Instagram de la Casa Real.
La cena carga de simbolismo católico de los Grimaldi y la atípica cena de la Familia Real noruega
La cena típica de Nochebuena para los Grimaldi está compuesta por unos entrantes a base de empanadillas con rellenas elaborados a partir de distintas verduras como la calabaza o las espinacas, focaccias con distintas hierbas aromáticas y anís o azahar además de otras elaboraciones frías. El principal es un guiso de bacalao llamado “barbagiuans” que se elabora con el mencionado pescado, cebolla, ajo y nata, consiguiendo como resultado un cremoso estofado.
El momento de los postres está cargado de simbolismo para los Grimaldi y es que la tradición marca que se sirven un total de trece dulces ¿por qué trece? Pues porque las elaboraciones simbolizan a los doce apóstoles y a Jesucristo. Esta selección de dulces tan católica está formada por turrones, frutas confitadas, frutos secos y distintos postres creados por el Chef Pierre Lacam, quien fuera pastelero de la corte real en el S.XIX. Además, todo ello se riega con el chocolate caliente favorito de Alberto de Mónaco, que es un brebaje obligatorio año tras año en la corte monegasca.
Para acabar, repasamos qué se servirá en Oslo esta Nochebuena. La cena de los integrantes de la Familia Real de Noruega, que han vivido uno de sus años más convulsos con los escándalos protagonizados por el chamán marido de Marta Luisa y el hijo de Mette-Marit, estará compuesta por entrantes elaborados a base de distintas verduras y productos del mar como salmón y cangrejos tan típicos del país. El principal que la Familia Real degustará no es nada tradicional en el país nórdico, en el que se suele cenar o bacalao o una especie de cordero seco. Y es que la Familia Real se decanta por degustar cerdo asado a la parrilla. Los postres, eso sí, son más tradicionales. En Palacio se suele servir una selección de distintas pastas y galletitas danesas entre las que destacan una especie de gofres pequeños con forma de corazón muy típicos.