El pasado lunes, 27 de enero, las distintas agendas de los miembros de la realeza europea se unieron por un único motivo: el 80 aniversario de la liberación del Holocausto. Aunque fue el Rey Carlos quien se desplazó hasta Polonia, Kate Middleton y el Príncipe Guillermo también quisieron rendir homenaje a las víctimas de la tragedia en un día muy significativo: “Hoy recordamos a los seis millones de judíos asesinados en el Holocausto, víctimas de la persecución nazi, así como a las víctimas de genocidios más recientes, entre ellos Camboya, Ruanda, Bosnia y Darfur”, escribieron en Casa Real, acompañando estas palabras con unas imágenes en las que la Princesa de Gales se lleva una gran parte del protagonismo.

Kate Middleton en el homenaje a las víctimas del Holocausto

Kate Middleton en el homenaje a las víctimas del Holocausto.

Gtres

Todas las miradas fueron a parar inmediatamente a Kate Middleton, y no es para menos. Desde que fue diagnosticada de cáncer, la Princesa de Gales ha reducido significativamente su agenda. Aunque en eventos relevantes y de este calibre, la mujer del Príncipe Guillermo deja atrás el hermetismo para mostrar su compromiso también con la Corona. Aunque, teniendo en cuenta la sobriedad de la cita, vistió de riguroso luto e hizo uso de un complemento que no pasó desapercibido: un espectacular collar de perlas.

La importancia de las perlas dentro de la Familia Real británica

Pese a que en un primer momento pudiera parecer un mero accesorio para elevar el look, nada más lejos de la realidad. ‘The Telegraph’ ha revelado la gran incógnita que gira en torno a este collar de perlas de cinco hilos de Susan Caplan. Y es que, las perlas blancas son las joyas que la Familia Real británica usa en los actos de luto, por lo que se las denomina “joyas de luto”. Su origen se remonta al reinado de la Reina Victoria, pues tras la muerte de su marido, el Príncipe Alberto; ella vistió de negro durante cuatro décadas para rendirle homenaje. Tan solo hacía uso de joyas negras o incoloras, además de perlas, que por aquel entonces se creía que eran símbolo de las lágrimas. 

Kate Middleton encendiendo una vela

Kate Middleton encendiendo una vela.

Gtres

Esta tradición ha estado muy presente entre los miembros de la Familia Real británica hasta ahora, pues en los funerales de Isabel II y el Príncipe Felipe, las féminas hicieron uso de complementos con perlas, siguiendo así la costumbre de las generaciones previas. De hecho, Leslie Field, autora de ‘Las joyas de la Reina’ dijo a ‘People’ que “las perlas son una tradición para las reinas desde hace mil años”, pues “nunca ha habido una Reina que no usara perlas”: “Eran raras, hermosas y brillantes, y cuanto más las usas, más brillantes se vuelven”.

Kate Middleton afronta el 2025 con esperanza y muchos planes pendientes

Durante toda la jornada, Kate se mostró de lo más cercana con los asistentes, especialmente con una de las personas que sobrevivieron al Holocausto. Se trata de Yvonne Bernstein, al que la Princesa de Gales se alegró de volver a ver: “Es muy agradable verte”, le dijo. Sobre todo, teniendo en cuenta que se había enfrentado a algunos problemas de salud recientemente, de los que se había informado a la mujer del Príncipe Guillermo: “Has pasado por momentos muy difíciles, ¿no?”, le preguntaba.

 

Cabe destacar que, precisamente, ella también ha atravesado los momentos más complejos de su vida. El 2024 fue un ‘annus horribilis’ en toda regla para Kate, que comenzaba con una cirugía abdominal aparentemente sin mayor complicación. Sin embargo, las semanas pasaban y la información respecto a la Princesa era nula, hasta que ella misma decidió romper su silencio y tomar la palabra para anunciar que padece cáncer, y que, por ende, permanecería alejada de sus compromisos profesionales. 

 

Por suerte, la situación de la nuera del Rey Carlos ha ido evolucionando favorablemente, y nada tiene que ver con la que tenía hace un año. La quimioterapia y el reposo han hecho que el cáncer esté en fase de remisión. Así lo comunicaban tanto ella como su marido a través de sus redes sociales oficiales, horas después de haber visitado por sorpresa el Royal Marsden Hospital de Londres, donde la Princesa quiso agradecer a los trabajadores el apoyo recibido y su paciencia mientras recibía el tratamiento contra su enfermedad: “Es un alivio que esté ahora en remisión y sigo centrada en la recuperación (…) Como sabrá cualquiera que haya sufrido un diagnóstico de cáncer, lleva tiempo adaptarse a una nueva normalidad. Sin embargo, estoy deseando que llege un año lleno de satisfacciones”, escribía la propia Kate. Unas palabras con las que demostraba estar dispuesta a afrontar este 2025 con la mayor de las ilusiones y optimismo, e incluso con algún viaje internacional previsto de cara a los próximos meses. Una serie de planes en los que, a buen seguro, contará con la fiel compañía de su marido, que permanece a su lado en todas y cada una de las situaciones.