El pasado mes de marzo los duques de Sussex anunciaron su nueva aventura empresarial. En concreto, Meghan, anunció que se embarcaría en una nueva marca de lifestyle en la que vendería productos para el hogar que guardasen un especial lugar en su corazón. La marca, además, pondría a la venta productos elaborados con frutas cultivadas en su propiedad de los Ángeles. En junio algunas celebrities de su entorno más cercano recibieron un bote de mermelada de frambuesas de su propio jardín con un bonito envase y todo parecía indicar a que se comercializaría para el gran público a través de la web de la marca, donde había una lista de espera para apuntarse y recibir novedades.
Ahora, cinco meses después de que supiéramos de la marca por primera vez todo sigue igual. La marca no ha sido lanzada, la web sigue albergando únicamente una lista de envío de correo para recibir novedades cuando las haya y tampoco se ha realizada ningún envío de productos a nadie del entorno de los duques. ¿Qué está pasando? ¿Ha paralizado Meghan este nuevo proyecto? Vamos a descubrirlo.
El apoyo de Netflix
Desde que la pareja dejara la familia real británica en 2018 han contado con distintos proyectos para asegurarse su estilo de vida. Empezando por el libro que Enrique escribió contando su experiencia personal creciendo sintiéndose “el repuesto”, la entrevista con Oprah, hasta los dos documentales de Netflix que han protagonizado, uno sobre su salida de la familia real británica y otro sobre los Invictus Games. Ahora, según publica el Daily Mail, el futuro inmediato de la pareja y la marca ‘American Riviera Orchard’. Meghan acabaría de terminar de grabar un programa de conocido para el gigante del streaming a nivel mundial en el que la duquesa de Sussex cocinaría usando todos los utensilios de su propia marca.
La producción ya estaría completamente grabada a la espera de ser montada y subtitulada para todos los idiomas disponibles en la plataforma con la idea de poder ser lanzada a nivel mundial la próxima primavera. Este lanzamiento se estaría también viendo retrasado por los problemas que han relegado el lanzamiento de la propia marca en sí. De hecho, otro de los planes que se habría retrasado es el del lanzamiento de un vino rosado, como os comentamos hace unas semanas. Por el momento todos los proyectos que tienen que ver con la marca de productos de Meghan tendrá que esperar.
Los problemas que retrasan el lanzamiento
Según las informaciones a las que Daily Mail ha tenido acceso sobre las oficinas de patentes y marcas de los Estados Unidos, distintas irregularidades están frenando el registro de la marca desde a solicitud inicial el pasado mes de marzo. En concreto se han notificado a los Sussex distintos problemas legales de clasificación de la marca además de la clasificación incorrecta de mantas de yoga, cestas de picnic y libros de recetas, entre otros productos de ‘American Riviera Orchard’. Todas estas irregularidades están generando tasas adeudadas en varios organismos de todo el mundo, ya que la pretensión de la pareja es que se puedan adquirir sus productos desde cualquier lugar del globo.
Ahora mismo para seguir con los trámites, los Sussex deberían abonar más de 11.300 dólares y aquí es donde de nuevo llega al rescate Netflix. Parece ser que la plataforma de contenidos estaría dispuesta a hacer frente a sufragar todas las necesidades económicas de registro de la marca a nivel mundial para gestionar como un pack el programa de cocina y la distribución del merchandising oficial a través de la marca de los duques de Sussex. De este modo, todo aquel espectador de Netflix que viese un utensilio en el programa de Meghan que quisiera tener en su casa podría adquirirlo a través de la tienda oficial gestionada por la propia plataforma en colaboración con los Sussex.
Las críticas que ha suscitado la marca
Hasta ahora, tal y como pasa con todo lo que tiene que ver con Enrique y Meghan, la marca ‘American Riviera Orchard’ ha despertado todo tipo de críticas. Detrás de ella hay quien solo ve una nueva oportunidad de seguir sacando rédito económico de pertenecer a la familia real británica, de hecho, el logo es un monograma como los que se realizan en la familia real para cada uno de sus integrantes, algo que muchos han visto como una provocación al establishment. Además, el envío de las mermeladas a distintas personalidades coincidió curiosamente con la primera aparición pública de Catalina de Gales tras el anuncio de que padecía un cáncer el pasado mes de marzo. Esta sencilla coincidencia no habría llamado la atención si no fuera por el historial de desaires y desavenencias que llevan tras de sí los Sussex y los príncipes de Gales.