Desde que anunció que padece cáncer, el pasado 22 de marzo, Kate Middleton (42) está inmersa en el tratamiento que recibe para mitigar su enfermedad. Aislada de la vida pública, la mujer del Príncipe Guillermo se ocupa más que nunca de sí misma y de su familia. De un lado quedan sus compromisos oficiales hasta que no esté recuperada. Hasta que no llegue el momento de tener fuerzas suficientes para volver seguirá estando en un segundo plano.
Ante este nuevo y complicado panorama, la vida familiar cobra mayor importancia que nunca en el día a día de los Príncipes de Gales. Podría decirse que en estos tiempos de adversidad ella se apoya más que nunca en su marido y en sus tres pequeños. Ellos le dan fuerzas para continuar. Pero, ¿qué pasa con Guillermo? ¿Quién está siendo su principal apoyo ante el doloroso periodo que le ha tocado vivir? Pues bien. Te contamos de quién se trata: es una mujer muy cercana a él la que está siendo su paño de lágrimas.
Por mucho que la prensa internacional se empeñe en asegurar que Rose Hansbury, la supuesta amante del Príncipe, ha reaparecido en su entorno, -quizás con intenciones de 'arrimarse' al Príncipe de Gales-, lo cierto es que nada parece indicar que entre ella y el futuro rey del Reino Unido haya más que una amistad.
Quien sí está ocupando un rol muy especial en estos momentos es otra mujer. Se trata de su mejor amiga. También es su confidente desde que ambos eran apenas unos niños. Hablamos de Zara Anne Elizabeth Phillips, más conocida como Zara Tindall, hija de la Princesa Ana y el oficial Mark Phillips, y por tanto prima hermana de Guillermo.
Zara, de 43 años, -dos años menor que Guillermo-, es prácticamente una desconocida para el mundo entero. Aficionada a la hípica y a su vida privada, tiene un perfil bajo y apenas copa titulares en la prensa del corazón. Sin embargo, es una de las personas claves en la vida de Guillermo. No en vano ha pasado gran parte de su infancia a su lado. Sin embargo, a diferencia de este, no se la considera un miembro "royal" oficial de la Casa Real británica. Esto ha hecho que crezca con la libertad de ser un espíritu libre, digamos.
Loca por las carreras de caballo y declarada fan de la cocina natural y los alimentos naturales, Zara Tindall es en estos momentos una de las personas de confianza de la Familia Real británica en la que tanto Carlos III como su primogénito, el Príncipe Guillermo, se están apoyando para superar este duro bache.
En la prensa británica la denominan "la prima moderna" de Guillermo de Inglaterra. No les falta razón. De algún modo, es un verso suelto en la realeza británica. Casada con Mike Tindall, exjugador de rugby, tiene tres hijos: Mia, Lena y Lucas. Se dieron el 'sí, quiero' en el año 2011 en la iglesia de Canongate, situada en la céntrica avenida de Royal Mile, en Edimburgo.
La pareja tuvo la opción de casarse en la abadía de Westminster, escenario habitual de las bodas reales en el país. Sin embargo decidieron hacer algo fuera de la norma y se juraron amor eterno en Escocia.
La verdad es que en la vida de Zara Tindall se sale de todo renglón. Valga como ejemplo que su padrino de bautizo fue Andrew Parker Bowles, ex de su madre, compañero de polo del entonces Príncipe Carlos y marido en aquel momento con Camilla Parker Bowles, hoy reina de Inglaterra. En su día, la elección del padrino de la Princesa Ana enfureció tanto a Diana de Gales que no acudió a la ceremonia.
No cabe duda de que la anécdota de su bautizo le va como anillo al dedo. Porque nada de lo que hace Zara Tindall atiende a heterodoxias. Otra muestra de cuán libre ha sid siempre en sus movimientos es que se empecinó en triunfar como amazonas. Y lo consiguió. Participó en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, donde ganó la medalla de plata por equipos. Una condecoración que le impuso su propia madre.
En los últimos años, Zara Tindall ha sabido sacar provecho económico del tirón mediático que tiene dentro de Estados Unidos. Ha puesto su imagen al servicio de varias marcas conocidas, entre ellas una casa de apuestas deportivas.
En el año 2015 se estrenó como diseñadora de joyas para la firma Calleija, una marca clásica con 200 años de antigüedad que solo compran los bolsillos más acaudalados del país anglosajón.
Dice la prensa británica que la relación entre Zara Tindall y Kate Middleton es excelente. No es de extrañar. Seguro que la Princesa de Gales agradece tener a alguien tan cercano ella en el seno de su familia política, que igual comparte un vídeo preparando pasta en su casa que sale a la calle con un piercing en la oreja. De puertas para adentro, a ambas les encanta quedar dentro de palacio con sus respectivos maridos e hijos, quienes, casualmente, son también compañeros de juegos y de secretos compartidos.