En los últimos meses, la Familia Real de Noruega ha estado en el punto de mira a raíz de los continuos reveses que han sufrido. El foco está puesto ahora en la Reina Sonia, quien ha hecho sonar todas las alarmas sobre su estado de salud después de haber tenido que pasar por quirófano. Tras someterse a una operación de corazón, la Casa Real ha emitido un comunicado dando el último parte de salud. 

Sonia de Noruega

Gtres

La Reina Sonia de Noruega, de 87 años, ha sido operada este jueves, 16 de enero, para ponerle un marcapasos. Una operación con resultados satisfactorios, pero que obligarán a la mujer del Rey Harald a permanecer ingresada en el hospital durante varios días. 

"A la Reina Sonia le colocaron un marcapasos hoy. La operación fue exitosa y la Reina se encuentra bien. Estará en el hospital entre uno y dos días", ha asegurado la Casa Real de Noruega mediante un comunicado. La madre del Príncipe Haakon fue ingresada en el centro hospitalario bajo observación tras una arritmia. 

Hay que recordar que este bache de salud de la Reina Sonia llega casi un año después de que su marido tuviera que pasar por quirófano para que le colocaran también un marcapasos. El Rey Harald tuvo que ser operado en Malasia, donde se encontraba de vacaciones privadas. Tuvo que ser trasladado a Noruega poco después en un avión medicalizado facilitado por el Gobierno y las Fuerzas Armadas del país. 

La Reina Sonia no olvida el ingreso del Rey Harald en Malasia

Harald y Sonia de Noruega

(Gtres)

Antes de dar la bienvenida al 2025, la Familia Real de Noruega hacía un balance del año y concedía una entrevista a la NRK, la televisión pública del país. A pesar de que se vetaron varias preguntas en relación con los escándalos de Marius Borg, los Reyes noruegos se sinceraron sobre el paso de Harald por el hospital de Malasia. La madre del Príncipe Haakon llegó a pensar que no volvería a su país con su marido, temía que no hubiera sobrevivido. Algo que ha provocado un gran pesar en ella. "Fue un auténtico shock. Tenía miedo. Me llegué a preguntar si volvería sola a casa. Y no fue un pensamiento agradable", llegó a contar. 

Los Reyes Harald y Sonia de Noruega eligieron Malasia por el clima. Un destino paradisiaco en donde celebrar el cumpleaños de la Reina y que no les era desconocido porque habían estado en otras ocasiones. No obstante, el monarca se dio cuenta de que estaban muy lejos de casa tras el ingreso. Fue el médico personal del soberano el que recomendó su ingreso. De hecho, llegó a viajar al país para valorar en primera persona cuál era la situación. 

Tanto el Rey Harald como el doctor ponían de relieve a que este bache de salud fue una cuestión de "mala suerte". "El Rey se encontraba bien para viajar. También debo añadir que es posible tener mala suerte. Creo que él tuvo mucha mala suerte durante sus vacaciones. Cuando personas cercanas a los 90 años tienen que ser ingresadas en el hospital para recibir antibióticos por vía intravenosa, la situación es sencillamente muy grave", contaba el médico Bjørn Bendz en la televisión pública.

Algo parecido aseguraba el Rey Harald:  "Estaba perfectamente sano cuando me fui. No fue mi culpa". El monarca volvió al trabajo ocho semanas después de que le colocaran el marcapasos, aunque admitió que su estado físico no era el mejor. También se modificó de forma notable su agenda y sus apariciones. Según su médico personal, asumía muchos compromisos y eso podía repercutir en su estado de salud. Durante el 2024 estuvo presente en 317 actos oficiales, 114 salidas menos que en 2023.

Así vivió el Príncipe Haakon el ingreso de su padre en Malasia

Sonia, Haakon y Harald de Noruega

Sonia, Haakon y Harald de Noruega

Foto: Gtres

En la entrevista de final de año, el Príncipe Haakon hablaba por primera vez largo y tendido sobre cómo había vivido el gran bache de salud de su padre. "El Rey estaba muy lejos. Fue un poco difícil porque había mucha diferencia horaria. Durante un tiempo la situación estaba un poco confusa y tampoco recibimos la información tan rápido como nos hubiera gustado", reconocía el marido de Mette-Marit. Por otro lado, el heredero al trono admitía que afortunadamente su padre fue bien atendido. "Ese fue nuestro principal objetivo", aseveraba en la NRK.