Puede que en septiembre y octubre, aprovechando los últimos rayos de sol y el bronceado veraniego, no usásemos base de maquillaje. Sin embargo, ya en noviembre, con el cambio horario y la poca radiación solar, buscamos darle un poco de color a nuestro rostros a través de bases y cremas llenas de pigmento. En esta época, la BB cream es perfecta, ya  que combina en un solo producto varias funciones. Todas ellas necesarias. Este tipo de cremas logran hidratar nuestra dermis, protegerla del sol, iluminar y dar un leve tono a la piel. Es por ello por lo que se ha convertido en uno de los cosméticos favoritos por las amantes del mundo beauty. Y, obviamente, nosotros somos grandes fans de él. No obstante, y aunque en el mercado hay muchos a precios más que razonables, nos hemos animado hacer la nuestra aprovechando los restos de nuestro neceser. Una idea tan útil que necesitábamos compartir.

¿Qué es una BB Cream?

Antes de ponernos manos a la obra, es importante que sepamos qué significa realmente BB Cream. Se trata de unas siglas que hacen referencia a Blemish Balm (bálsamo para imperfecciones), por lo que esta crema busca, principalmente, corregir esas pequeñas imperfecciones con tan solo aplicar una leve capa de producto. No es más que una crema con un poco de maquillaje ideal para tapar esas manchas o granitos de nuestro rostro. Por su composición, su textura es más fina, ligera y fluida que la de bases corrientes, por lo que también la cobertura es algo menor. Sin embargo, es perfecta para el día a día ya que consigue aportar un acabado natural y no asfixiar nuestros poros.

Este tipo de cremas, además suele incorporar filtros de protección solar; lo que lo convierte en uno de los cosméticos más completos del momento. Existen diferentes tipos de BB cream, en función del tipo de piel que tengamos, textura que más nos guste  o el tono que queramos conseguir; pero todas ellas cuentan con características similares. Es por ello por lo que nos hemos atrevido a crear la nuestra propia, usando restos de maquillaje y crema que ya teníamos en casa.

¿Cómo puedo hacer una en casa?

Como las BB Creams son básicamente la unión perfecta entre una base de maquillaje y una crema hidratante facial con protección solar, usando estos dos productos y uniéndolos en un mismo recipiente podemos crear nuestra propia crema con pigmento. Para ello solo necesitamos utilizar algunas gotitas de esa base de maquillaje que ya no usamos; de ese make up que ya está demasiado seco o cuyo color ya no nos convence demasiado y mezclarla con un poco de crema facial según nos parezca. Recomendamos ir añadiendo gota a gota para controlar la consistencia y el tono que queremos conseguir. Así lograremos un producto nuevo aprovechando los restos de nuestra bolsa de aseo y dándoles una nueva vida. ¡Tachán!