Innovar, buscar soluciones más efectivas y luchar por encontrar formas y modelos más eficientes (y sostenibles) es, sin duda, imprescindible en la sociedad en la que vivimos actualmente. La idea es pasar por este planeta dejando la menor huella posible, para que los que vienen detrás puedan disfrutarlo tanto o más de lo que lo hemos hecho nosotros. Es como cuando madrugar para ir a la montaña en invierno a primera hora de la mañana; buscando encontrar una zona blanca, completamente nevada e impoluta, una zona intacta, sin pisotones ni machas de barro. Quieres encontrar la nieve de la forma más pura posible y así es cómo que las generaciones venideras querrán encontrar el mundo en el que vivimos. Limpio, cuidado, sin pisotones ni manchas. Y nosotros como individuos tenemos una pequeña responsabilidad; pero son las grandes empresas las que verdaderamente tienen el poder de cambiar las cosas. Y lo saben. Es por ello por lo que muchas marcas de cosméticos están comenzando a innovar en sus fórmulas y envases, creando productos más sostenibles. Entre ellos, los desodorantes.

Acostumbrados desde años décadas a los desodorantes en spray o roll on; puede que nos resulte extraño y hasta imposible encontrar productos que eliminen el mal olor de nuestras axilas y que se encuentren en formatos diferentes, igualmente eficaces pero mucho más respetuosos con nuestro entorno. Sin embargo, estamos aquí para decirte que existen y que, sin duda, son toda una revolución. Los desodorantes en polvo, en crema o sólidos consiguen prevenir la aparición de sudor pero además cuidar el medio ambiente. Pero... ¿por qué?

Así son los desodorantes del futuro (que ya puedes comprar en el presente)

No es una noticia nueva que los desodorantes en spray contaminan enormemente. Antes, para elaborarlos se necesitaba CFC, que destrozaba el ozono; ahora, en lugar de este polémico químico, suelen contener altas concentraciones de compuestos orgánicos volátiles (COV), que no dejan de contaminar nuestra atmósfera. Por lo tanto, no son una muy buena opción. Si usas un desodorante en spray, déjame decirte que deberías empezar a replanteártelo. Por otro lado, los roll on (o desodorantes de bolo), pueden llevar parabenos, aluminio o triclosán y para fabricar su curiosos mecanismo, se necesita mucho plástico. Nada bueno para nuestro planeta.

Es ahora cuando llega el turno de los desodorantes del futuro. En polvo, en crema o en barra, son los más comprometidos con el medio ambiente pero también con el cuidado de nuestra piel. Sus envases suelen ser de cristal, cartón o precisar de poco plástico; además de que todos están elaborados de ingredientes 100% naturales y sin químicos dañinos para nuestra dermis. Una revolución contra el mal olor que promete crear un gran cambio.