Cada vez son más populares los tratamientos no invasivos para mantener la piel más joven, jugosa, firme y luminosa. María Patiño ha dado con el tratamiento que mejor le funciona, tanto que le preguntan qué se ha hecho y todo sin recurrir a agujas o a pasar por el quirófano. ¿Cuál es su secreto? La radiofrecuencia Vossman.
El entrenamiento facial de María Patiño
María Patiño estaba buscando un tratamiento no invasivo que le permitiera combatir la flacidez, las arrugas y las líneas de expresión. La periodista explica que es una gimnasia facial: “había descubierto que aparte de entrenar el cuerpo se puede entrenar la cara. Fui a ver a un especialista de estética y me recomienda la radiofrecuencia de Vossman”. Es un aparato que hay que utilizar a diario y María asegura que “hace un efecto lifting desde el primer día, estoy encantada, todo el mundo me dice ‘qué te has hecho en la cara’, es impresionante”.
Aunque los rellenos dérmicos están a la orden del día, Patiño no ve para ella este tipo de tratamientos: “Yo no soy nada partidaria de los rellenos porque van modificando la cara”, afirma. Sin embargo, el aparato de radiofrecuencia diario que le permite hacer esa gimnasia facial le ayuda a abordar la flacidez, las arrugas y mejorar la textura cutánea.
La eficacia del tratamiento diario de María con este aparato de radiofrecuencia radica en que estimula la producción de colágeno y elastina, proteínas clave para una piel joven y firme.
La radiofrecuencia que ha transformado el rostro de María
María Patiño está encantada con los resultados que le ofrece esta radiofrecuencia, un método que ha incluido en su rutina diaria al igual que el ejercicio físico. De esta manera se asegura de hacer su ‘gimnasia facial’ para lucir una piel mucho más firme. La radiofrecuencia Vossman utiliza ondas electromagnéticas que generan un calentamiento controlado en las capas más profundas de la piel. Este calor estimula los fibroblastos, las células responsables de producir colágeno y elastina, promoviendo la reparación y regeneración natural de los tejidos.
Este método es una técnica eficaz de rejuvenecimiento facial y es muy segura. Es ideal para reducir arrugas, líneas de expresión y flaccidez en rostro, cuello y escote. Consigue un tensado visible de la piel sin necesidad de bisturí, logrando un resultado natural y progresivo. Además, mejora la densidad, elasticidad y firmeza de la piel a largo plazo, ralentizando el proceso de envejecimiento. Reduce el tamaño de los poros, suaviza las cicatrices y mejora la apariencia de la piel y lo mejor de todo, no necesita tiempo de recuperación o preparación alguna.
La radiofrecuencia está indicada para cualquier persona que, como María Patiño, quiera mejorar la calidad de su piel de forma no invasiva, especialmente para combatir flacidez, arrugas, líneas de expresión, pérdida de elasticidad, textura desigual, poros dilatados… es un tratamientos preventivo para frenar el envejecimiento sin tener que someterse a una cirugía o procedimientos dolorosos invasivos.
Cómo estimular la producción de colágeno de manera natural
El colágeno y la elastina son dos proteínas esenciales que garantizan la firmeza, elasticidad y juventud de nuestra piel. Con el paso del tiempo, su producción natural disminuye, lo que favorece la aparición de arrugas, flacidez y pérdida de tono. Además de tratamientos de radiofrecuencia como el de María Patiño, podemos incluir en nuestra rutina hábitos que favorezcan la producción de colágeno y elastina que van a hacer que la piel se vea más joven, saludable y bonita:
- Alimentación saludable: Incluye en tu dieta vitamina C (cítricos, pimientos…) ya que esta vitamina antioxidante es fundamental para la producción de colágeno. Las proteínas son imprescindibles para la formación de colágeno (huevos, pescado, carne, frutos secos, legumbres…). Ácidos grasos omega-3 como el salmón, sardinas, semillas de lino, que mejorar la elasticidad de la piel y reducen la inflamación. Zin y cobre, minerales esenciales que se encuentran en alimentos como mariscos, semillas de calabaza, nueces… y también antioxidantes como el té verde, los frutos rojos o las verduras de hoja verde protegen frente al estrés oxidativo.
- Hidratación: El agua es indispensable para mantener la piel hidratada y evitar la rigidez de las fibras de colágeno y elastina. Bebe al menos 2 litros de agua al día y complementa con cremas y sérums que contengan ingredientes hidratantes como el ácido hialurónico.
- Ejercicio físico: El ejercicio, especialmente actividades que estimulan el flujo sanguíneo como caminar, yoga o entrenamiento de fuerza, mejora la circulación, transportando más oxígeno y nutrientes a la piel. Esto favorece la regeneración celular y la potencia la síntesis de colágeno y elastina.
- Protección solar: La exposición excesiva al sol es una de las principales causas de la degradación del colágeno y la elastina. Los rayos ultravioleta generan radicales libres que destruyen estas proteínas esenciales. Usa un protector solar con SPF 30 o más cada día, incluso en invierno, y reaplica cada dos horas si estás al aire libre.
- Ingredientes cosméticos: Ingredientes activos como los retinoides, los péptidos, la vitamina C o los ácidos alfa hidroxiácidos (AHAs) son claves en la rutina facial para estimular la producción de colágeno y elastina.
- Descansa: Durante el sueño, la piel se regenera y produce más colágeno. Dormir al menos 7-8 horas diarias en un ambiente oscuro y tranquilo permite a tu cuerpo realizar estos procesos de reparación celular de manera eficiente.
- Suplementación: Suplementos como el colágeno hidrolizado, la vitamina C o el ácido hialurónico van a ayudar a mejorar la piel desde el interior favoreciendo la producción de colágeno y elastina.
Eso sí, olvídate del tabaco, los azúcares, el alcohol y los ultraprocesados e intenta reducir el estrés en tu vida. Un estilo de vida saludable se nota por dentro, pero también por fuera.