Otoño es una estación de transición que nos ayuda a adaptarnos al frío, el recogimiento y la introspección a la que invita el invierno, sólo alterada por el jolgorio de las fiestas navideñas. Una experta nos da las claves para llegar a Navidad con una mejor salud física y mental para poder disfrutarlas como nunca.

Los turrones está a la vuelta de la esquina y, aunque es una época mágica, muchas personas la viven con ansiedad y estrés, además de contar con un sistema inmune más débil por culpa de los catarros otoñales. El otoño nos da la oportunidad de trabajar nuestra salud física y emocional para poder afrontar mejor la llegada del invierno que se inaugura con las navidades.

El cuidado de la salud en otoño, ¿dónde debemos poner el foco?

Con la llegada del otoño debemos hacer especial hincapié en nuestra salud ya que, la bajada de las temperaturas suelen traer consigo catarros, resfriados y gripes. ¿Por qué el otoño es una época en la que somos proclives a este tipo de enfermedades comunes?

 

¿Qué podemos hacer para fortalecer nuestro sistema inmune y llegar a Navidad de la mejor manera posible? “Lo importante aquí es mantener una salud de hierro y un sistema inmunitario fuerte, lo cual se consigue con un buen entrenamiento de fuerza, una dieta saludable –sin tóxicos evitando la comida basura, el alcohol y el tabaco– y cuidando el descanso”, afirma la experta.

No sólo la salud física se ve afectada en otoño, también la salud emocional puede necesitar de una ayuda para reforzarse y aumentar así nuestro bienestar en esta delicada época.

Cómo elevar el estado de ánimo en otoño
En otoño debemos prestar atención a la dieta, el entrenamiento y el descanso para reforzar nuestra salud física y mental. (Pexels)

Claves para mejorar la salud emocional esta temporada

El otoño comienza a oscurecer antes y sufrimos el dichoso cambio de hora que rompe nuestros ritmos circadianos. Es inevitable que nuestro estado de ánimo se vea afectado. Mar Planas asegura que “es habitual que al reducirse las horas de luz mermen a su vez los ánimos. Además, las temperaturas animan a salir menos y también a pasear menos. Es una época donde suele aumenta la caída del cabello y, sin darnos cuenta, comenzamos a usar colores más neutros para vestir. Vivimoscon una actitud más apagada y hacemos menos cosas”. 

Este período, que podríamos llamar incluso melancólico, ¿cómo lo revertimos? “Manteniendo nuestras actividades tanto como sea posible e independientemente de la temperatura que hace en la calle. Es decir, salir a pasear aunque sea de noche o haga frío, mantener aquellas actividades que nos hacen sentir bien (citas, excursiones, entrenamiento…), independientemente del día que haga y, sobre todo, mantener nuestra rutina de entrenamiento de fuerza” subraya la experta.

¿Por qué el entrenamiento es tan importante para la salud mental? “Está demostrado que el ejercicio de fuerza aumenta la autoestima. Las mujeres que entrenan reportan una mayor autoconfianza, un mejor autoconcepto y más seguridad en ellas mismas. Más allá de eso, el ejercicio físico con pesas nos obliga a salir del estado hacia dentro típico del otoño y nos hace segregar gran cantidad de hormonas del placer y de la felicidad. De esta manera, te sientes bien porque te has cuidado y cuando empiezas a ver resultados te animas a seguir porque te sientes satisfecha por haberlo logrado”, argumenta Planas. El ejercicio físico sería, sin duda, la clave que uniría el cuidado del cuerpo y de la mente en otoño

Cuidados que debemos dispensar a nuestro cuerpo y nuestra mente para mejorar nuestra calidad de vida

Los tres pilares fundamentales que no pueden faltar en una vida plena y saludable, según Mar Planas, serían: 

1) Cuidado del cuerpo: Sigue una dieta saludable y equilibrada. Prioriza los alimentos vegetales, grasas saludables de forma moderada, suficiente proteína y carbohidratos en función siempre de tu actividad. Realiza entrenamiento de fuerza para tener energía y prevenir cualquier enfermedad o molestias articulares. Todo ello nos hará construir un cuerpo firme y esbelto y nos hará sentirnos poderosas. Y, por último, no hay que olvidar dormir las horas necesarias. Según la ciencia dormir 7 horas al día sería la óptimo.

2) Cuidado de la mente: Es muy importante la curiosidad, leer y aprender cosas nuevas, “siempre cuidando qué dejamos entrar en nuestra mente porque es lo que determina los dos esquemas de pensamiento posibles, que son: por un lado, si dejamos entrar negatividad, pesimismo y victimismo que abunda en nuestra sociedad, nos puede bloquear y afectar; pero, por otro lado, si decidimos consumir contenido inspirador y constructivo eso será lo que integremos en nosotras”, señala la experta.

Ocupar la mente con lectura y aprendizaje es enriquecedor.
Mantener la mente activa y cultivarla a través de la lectura es una buena estrategia para aumentar el equilibrio emocional. (Pexels)

3) Cuidado del alma: Investigar qué es lo que nos hace bien y hacerlo más. También detectar qué es lo que nos resta, o no nos aporta, y hacerlo menos o dejarlo de lado. Lo ideal sería dedicar unos minutos cada día al despertar a diseñar nuestro día, empezando por lo que nos hace felices, como cuidar las relaciones sanas y eliminar las nocivas.Y hacernos esta pregunta en esa primera hora del día: ¿Qué debería haber hoy en mi día para que merezca la pena ser vivido? Y después hacer que suceda.

Llegar a Navidad con una salud de hierro y un buen equilibrio emocional está en tu mano, sólo tienes que integrar hábitos saludables en tu vida, cuidarte y hacerlo como si cuidaras de alguien de quién eres responsable, como afirma el psicólogo Jordan Peterson. Mira al otoño como una oportunidad única para hacerlo.