La Reina Letizia ha reaparecido tras las vacaciones en Mallorca para despedir a su hija Leonor en la Academia Militar de Zaragoza, que se ha mostrado muy emocionada y "con ganas". Una ocasión importante y llena de emoción, en la que aunque la protagonista absoluta era la Princesa, ella ha ejercido como orgullosa madre, dejándonos unas preciosas imágenes en su adiós. Eso sí, sin demasiadas alaracas en cuanto a su estilismo. En un ambiente militar se pide austeridad, rectitud, decoro... Y ella lo ha cumplido a su manera con un look discreto y relajado.
¿Cómo? Con un traje de chaqueta y pantalón de lino en color crudo. No hay nada mejor para el verano que este tejido tan natural y transpirable. Letizia ha apostado por un conjunto que no la comprometía en absoluto. Sencillo y perfecto. Y además nos alegramos mucho de que haya vuelto a confiar en Adolfo Domínguez. Por debajo lucía un top fino con cuello a la caja en el mismo tono.
Y para completarlo, nada de alpargatas o tacones. La Reina se ha calzado unas bailarinas súper planas de serraje en un color parecido. Máxima comodidad para su dolencia de pies y, de nuevo, pensando también en el código de 'normalidad' para este momento.
¡Y todo al crudo! Letizia ha escogido la tendencia monocolor para una cita bajo un intenso sol de mediodía. Un pequeño 'pero': el look nos parece algo caluroso a primera vista. Si bien es cierto que, como decimos, el lino atenúa las temperaturas.
La chaqueta, con un solo botón y bolsillos, la llevaba remangada, dándole más ligereza. Los pantalones anchitos son de largo tobillero. Que no se diga que la Reina Letizia quería llamar la atención...
El guiño más sentimental lo hemos encontrado en sus pendientes, unos aritos dorados con forma de bambú. Aparte de ser de sus favoritos, también la Princesa Leonor los ha lucido en alguna ocasión. Una pieza que se prestan y comparten y las ha unido en una jornada inolvidable.
El próximo domingo 20 de agosto, Doña Letizia volverá a escena desde el otro lado del mundo, ya que asistirá junto a la Infanta Sofía a la final de la Copa del Mundo Femenina en Sídney (Australia). Una escapada entre madre e hija con el fútbol como leitmotiv y su apoyo a este deporte. De momento, ya ha dicho 'hasta luego' a su hija Leonor, deseándole la mejor de las suertes en esta nueva andadura.