Una vez más, Carlos Sobera ha visto peligrar la gala que conduce. Hace menos de un mes, en el primer 'Tierra de nadie', el presentador se enfrentaba a una noche llena de imprevistos en la que debido al fuerte temporal que azotaba los Cayos Cochinos, el programa se veía obligado a cancelar todo lo que tenían previsto para la gala. "Es una situación crítica", señalaba entonces. Y este martes ha vivido una especie de 'déjà vu'. "Un terrible temporal ha llegado a los Cayos Cochinos, el paraíso vuelve a hacer de las suyas", ha anunciado Sobera al inicio del programa, antes de conectar con Laura Madrueño, que confirmaba lo más temido. "Estamos pasando una noche muy complicada, pero estamos haciendo todo lo posible para recuperar la conexión con las playas", ha explicado la presentadora desde Honduras, contando que estaban viviendo una jornada de chubascos tormentosos extraordinarios "que están provocando inundaciones".
Madrueño ha desvelado que "este nuevo frente nos está dejando rachas de viento de más de 30 kilómetros por hora y un fuerte oleaje" que está impidiendo que los concursantes se trasladen hasta la playa en la que los espera la presentadora y donde se enfrentan semanalmente a las pruebas. "Vamos a intentar traerles cuanto antes, pero es que vamos a tener lluvias y tormentas hasta el jueves", ha continuado señalando Laura.
Laura Madrueño desde los Cayos
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"¿Otro martes así, Laura?", le preguntaba desesperado Sobera a su compañera, "siempre cae en martes, ni te cases ni te embarques, Carlos", bromeaba ella, "es una gala complicada, está lloviendo con muchísima intensidad, así que vamos a ver qué ocurre, porque tenemos unos juegos increíbles preparados...", ha anunciado.
Eso sí, "todo el equipo de Supervivientes está aquí desplazado para ofreceros una gala espectacular, aunque sea bajo este temporal que azota los Cayos", ha apuntado Madrueño, un comentario muy aplaudido en plató, incluso por parte del presentador, que no ha dudado en sumarse a este mensaje alabando la labor del equipo. "La lluvia dificulta la conexión, es muy complicado, por eso hay que agradecer el esfuerzo que está haciendo todo el equipo de Supervivientes en Honduras para conseguir que tengamos programa", ha dicho, orgulloso, desatando un fuerte aplauso del público.
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Para tranquilidad de familiares, amigos y seguidores de los supervivientes, han contactado con las playas y todos se encuentran perfectamente, eso sí, cobijados de las lluvias. "No veas la que está cayendo aquí", apuntaban desde Honduras los concursantes, "estamos poniendo humor, pero estamos en uno de nuestros peores días", confesaba Pelayo.
La organización de 'Supervivientes 2025', obligada a tomar medidas 'in extremis' ante las críticas en pleno directo de los concursantes.
Mediaset
La organización, obligada a tomar medidas 'in extremis'
La situación es tan límite que ha hecho estragos en los concursantes. Tanto que no han dudado en sacar las garras contra la organización para pedir que se tomen medidas a consecuencia, y es que las tormentas son tan fuertes que los recursos para sobrevivir escasean.
Por eso cuando Playa Misterio ha tenido que enfrentarse a su prueba de recompensa, han aprovechado para lanzar su queja al programa. Makoke, Manuel y Nieves han acudido a la Palapa para resguardarse del temporal y enfrentarse al juego de recompensa. "Estamos empapados, es horrible, está todo mojado", ha confesado la que fuera pareja de Kiko Matamoros, y es que las condiciones en su playa no son mejores que en la de sus compañeros, es más, tienen mayor oleaje, lo que dificulta la pesca, y el viento es más fuerte. Para colmo, no han sido capaces de controlar el fuego y tras ganarlo, en solo tres días, lo han perdido.
Por eso, la organización tenía preparada una gran sorpresa: la recompensa de este martes sería el fuego y un paquete de cerillas para mantenerlo. Sin embargo, no les ha hecho demasiada ilusión... "Veníamos halando todo el tiempo de que no tenemos comida ninguna. Tenemos un poco de arroz y de coco, estamos débiles y me da igual comer arroz duro, pero comer", ha expresado, pidiendo otro tipo de recompensa. "No nos queda ni una lata. No podemos ir a pescar en una tormenta", ha añadido Makoke. "Nos da igual el fuego si no tenemos que cocinar", ha dicho contundente. Unas palabras que Laura Madrueño se ha tomado muy en serio, y tras el beneplácito del equipo, ha aumentado la recompensa.
"Poseidón me está comunicado que por la situación límite y extrema que estamos viviendo, si conseguís superar este juego, además del fuego, os vais a poder llevar tres latas a vuestra playa. Tendréis que darlo todo", les ha comunicado la presentadora.