Omar Montes desvela uno de los episodios más complicados de su vida en 'Universo Calleja': "Acabó con un muerto"

Omar Montes ha sido uno de los invitados de excepción que han acompañado a Jesús Calleja en su aventura por Nepal en la nueva temporada de 'Universo Calleja'. El cantante, acompañado del creador de contenido 'TheGrefg', la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada y el también cantante Antonio Orozco, ha vivido momentos realmente inolvidables entre rutas y descubrimientos impactantes. Pero, como es habitual en el programa, también ha habido tiempo de compartir conversaciones profundas. Ya vimos cómo Orozco se abría en canal y se rompía al hablar de la muerte de Susana, la madre de su hijo, o como Sandra Barneda buscaba fuerzas para continuar tras el trágico fallecimiento de su sobrino con tan solo 20 años.

Ahora ha sido Omar quien se ha sincerado con Calleja y ha terminado protagonizando un emotivo momento. Después de ponerse al día y contarse cómo habían cambiado sus vidas desde hace cuatro años, sus éxitos profesionales y personales, la charla terminaba desembocando un tema que lograba emocionar al invitado.

Omar confesaba que le encantaría hacer una película o una serie sobre su vida. Sin embargo, Calleja le apuntaba que "no te ha pasado todavía vida suficiente para hacer una peli, falta el final un poco". Unas palabras que hacían que Omar quisiera convencerle: "No me juzgues por mi corta edad, Jesús. Yo tengo años perrunos. Mis años valen por cuatro". Y entonces el presentador indagaba: "A ver, cuéntame cosas duras que te hayan pasado". Y Omar no dudaba en sincerarse: "poco cuento... y más cuando estaba yo allí en el barrio", recordaba, haciendo referencia al barrio donde ha vivido toda su vida, Pan Bendito."En la antigua casa de mi Salcedo había un punto donde se vendían 'cosos'", comenzaba narrando. Un día, "veníamos de jugar al fútbol, doce o trece años podíamos tener...", añadía, haciendo una pausa para tragar saliva. "Joder... Es que esto es duro de contar, Jesús, esto es duro...", decía mientras le costaba continuar.

"Acabó con un muerto. Ya está. Ahí lo voy a dejar. Además, no me gusta hablar de estas cosas. Era un buen amigo y bueno...", finalizaba lanzando un beso al cielo.

Omar habla de sus grandes éxitos

Una de las confesiones que más han dado de qué hablar, ha sido su conversación sobre el dinero... Omar Montes lleva años cosechando grandes éxitos en el mundo de la música, algo que le ha generado grandes ingresos. "A nivel artístico estoy en mi 'prime', después de ocho años de carrera, este año he sido el que más canciones ha metido en el top 50 de lo más escuchado en Spotify", le comentaba a Calleja, "cada millón no sé si son tres mil pavos, e igual este año he tenido 500 millones de 'streams'". 

Unas cifras que le han llenado los bolsillos, y mucho, aunque "de ahí me ha quitado Hacienda, mi mánager... pero bien", seguía diciendo. Y entonces se ponía a hablar de impuestos, provocando un gran impacto en la audiencia. "Pago mis impuestos en España, me podría haber ido a Andorra, a Dubai, pero no, pago aquí y al final haces una cosa buena, uno está ayudando a contribuir en la mejora de las cosas, para hospitales, lo que sea, yo me quedo, estoy muy a gusto", le confesaba a Calleja, "mis amigos me dijeron que me fuera porque aquí me iban a crujir, pero qué más da, que me crujan, pa qué quieres el dinero si al final te vas a morir... ¿Quieres ser el más rico del cementerio?", continuaba. Unas declaraciones que han logrado conquistar a la audiencia. 

"Se llama Omar Montes y es músico. Aquí nos explica el porqué paga impuestos en España y la importancia de hacerlo. Se podría haber ido a Andorra o Dubai, pero quiere seguir en su tierra, para colaborar con la sociedad. Patriotismo es esto, lo de los youtubers andorranos es otra cosa. Estos mensajes son muy importantes", sentenciaba un espectador del programa en 'X'. "Don Omar Montes. Apuesta más por lo público que la presidenta de la Comunidad de Madrid", aplaudía otro.

El cambio de vida de Omar Montes

El cantante dejó atrás Pan Bendito, y confiesa, "para estar más tranquilo", y es que "había tiendas de campaña todos los días delante de mi casa y si no te paras a hacerte fotos eres un mierda, un mal educado", le contaba a Calleja, "es bonito porque se nota que la gente te quiere, pero yo qué se...". Ahora vive en Boadilla, una urbanización de lujo, a donde se ha llevado a su abuela, a su madre... "me paso por mi barrio a saludar y ya está".