La ex de Julián Muñoz estrenará "Mayte Zaldivar. Maldita la hora", su propia docuserie, el viernes 28 de enero en Telecinco.
La moda de los documentales parece no tener fin. Desde que Rocío Carrasco estrenase la docuserie 'Rocío, contar la verdad para seguir viva', otros rostros conocidos han emulado su ejemplo. Uno de ellos fue Julián Muñoz, al que hemos visto en las dos últimas semanas contando con todo lujo de detalles su relación con Isabel Pantoja o sus años en prisión tras ser condenado por el caso Malaya. Ahora toca el turno de quien fuera mujer del edil de Marbella. Mayte Zaldívar se sentará delante de las cámaras para contar su verdad.
La producción audiovisual, que lleva por título, "Mayte Zaldivar. Maldita la hora", se emitirá el próximo viernes 28 de enero. El debut de la que fuera 'primera dama' marbellí en los años de derroche y de gloria de la Costa del Sol se sentará delante de las cámaras para rememorar los momentos más importantes de su biografía: sus inicios como actriz en Madrid, su relación con el padre de su hija Eloísa, su matrimonio con el expolítico, la infidelidad de este con la cantante o las míticas bolsas de basura que había en su casa con fajos de dinero. Escenas que durante años han ocupado cientos de titulares y que tiempo atrás la encumbraron como uno de los rostros más aclamados de la crónica social.
Lo cierto es que Mayte Zaldívar no atraviesa su mejor momento. Desde que se supo que su hija Elia, padece cáncer, no levanta cabeza. Está angustiada y muy preocupada por la salud de su hija menor, a quien se la sido diagnosticado un tumor. "Necesito un milagro", explicaba, desolada, hace unas semanas. "Es algo que me arrea el corazón... “Os pido que recéis por mí, que me envíen las mejores energías para que me salga bien. Todo lo demás no me importa nada”.
Mayte, preocupada por la salud de su hija Elia
Elia, de 40 años, es su única hija en común con Julián Muñoz. Mujer discreta, siempre se ha mantenido muy unida a sus padres a pesar de las circunstancias a las que han tenido que hacer frente, así como a la presión mediática que ambos han soportado durante años. Hace poco, la propia Elia confirmaba la noticia de su enfermedad: “Perdona que sea bastante escueta, pero hoy me encuentro regular. Es cierto lo dicho. Muchas gracias y disculpa no poder decir más”, decía al diario 'El Español'.
La audiencia de Mediaset seguro que no se perderá el especial que ha preparado la cadena. Si ofrece tantos relatos jugosos como los que ha facilitado Julián Muñoz, el éxito está garantizado. Entre el testimonio que ha revelado el expolítico ante las cámaras destaca la «adicción» y la «obsesión» que sentía hacia la cantante cuando estaban juntos.
Tal era el enganche que tenía con Isabel Pantoja que no era capaz de ver más allá. Solo pensaba en ella. Hay que recordar que la sevillana tardó 97 días en acudir a la cárcel de Alhaurín de la Torre para visitar a su entonces novio tras su ingreso entre rejas.
El vis a vis de Isabel Pantoja y Julián Muñoz, contado en el documental del exalcalde
Muñoz ha contado cómo fue su primer vis a vis con la artista. "Te quieres poner tus mejores galas. Imagínate en la cárcel las galas que tenemos. Te miras al espejo 20 veces, te echas colonia y vas, dentro de lo que tenía ahí, iba impecable. Tenía muchos nervios», ha recordado. «La verdad es que la primera vez fue emocionante. Claro. Creo que le pasaron a ella primero en la habitación y después pasé yo».
«Le di un abrazo enorme. Un abrazo infinito y llanto. Emocionante. Claro. Hacía mucho tiempo que no la veía. Llevaba yo en la cárcel cuatro o cinco meses y no había ido nunca», ha destacado. Cuando la periodista Paloma García Pelayo le preguntaba si intimaron aquel día, respondía sincero: «Pues sí, hubo una relación. Imagínate. La relación en un cuarto pequeño, con las sábanas blancas…».
«Eran unas habitaciones que tenían una cama y un cuarto de baño. Eso sí, muy limpias. Y donde, depende, puedes mantener relaciones íntimas o puedes estar hablando o puedes estar besándote. En los vis a vis íntimos suele ocurrir que intimas con la persona. Vamos, que te acuestas con ella«, ha dicho. Después de aquel tórrido encuentro volvieron a verse una segunda vez. Pero en aquel cara a cara ya no había tanta pasión. Fue más bien una «visita de negocios» después de la información que había salido poco antes de los 400.000 euros que el político le habría dado a su exmujer.