La entrevista de Isa Pantoja el pasado fin de semana en '¡De viernes!'ha dado mucho de qué hablar. Bueno, y ha dado pie a 'guardar mucho silencio', también. Sus duras confesiones salpicaron directamente a su hermano, Kiko Rivera, y de momento su entorno ha preferido no pronunciarse. Tampoco su madre, Isabel Pantoja. Sin embargo, sí han querido hablar al respecto sus compañeros de trabajo, los colaboradores de 'Vamos a ver', que han opinado de lo sucedido sin pelos en la lengua.
Uno de los más contundentes ha sido, una vez más, Alessandro Lequio. El colaborador se mostraba, hace unas semanas, muy tajante tras el paso al frente que había dado Kiko Rivera en mitad de la polémica. Para él, al igual que para muchos, publicar un mensaje de felicitación por su embarazo en redes sociales no era más que 'postureo', ya que lo mejor habría sido mandarle un mensaje de forma privada. "Te da rabia sentir alegría porque te felicite tu hermano al que no ves y que no quiere saber nade de ti, no puedes evitar que te agrade porque en el fondo lo quieres", ha declarado Joaquín Prat.
Antonio Rossi, por otro lado, ha sido muy claro: "Si hubiera sido un WhatsApp, todavía podríamos buscar intencionalidad, pero en redes, una cosa pública, en la que ni la menciona… Es tan triste que Isa se agarre a eso… es asumir que está sola, que no tiene familia más allá de la que ha construido ella. Se conforma con migajas", ha sentenciado.
En sentir "pena" por Isa coinciden todos. "A mí me da pena, tiene unas intenciones más puras que los demás… Me ha impactado mucho verla llorar así, no es el momento, debería disfrutar de su embarazo", confesaba Alejandra Rubio, que como Isa, está viviendo la 'dulce espera' y sabe que lo que menos se necesita en estos momentos son dramas y tristezas.
Los episodios más duros para Isa Pantoja, a sentencia
El famoso manguerazo, la visita al ginecólogo, el salto a la valla o el corte de pelo con unas tijeras de cocina. Isa se deshizo en lágrimas el pasado viernes al desvelar, al detalle, los momentos más complicados junto a su familia. Unos momentos para los que Lequio ha hablado alto y claro.
Sobre la famosa frase que habría pronunciado Isabel Pantoja enviando a su hija de vuelta a Perú, el conde se ha mostrado de lo más benévolo: "Lo de la frase de Perú creo que no hay que tomársela al pie de la letra, fue fruto del enfado…". Sin embargo, sobre el episodio de las tijeras tiene una opinión muy firme que no deja en muy buen lugar a quienes estaban presentes.
¿Qué ocurrió aquel día? A la joven se le había prohibido tener móvil, ya que su familia había descubierto que tenía novio, por lo que no querían que siguiera hablando con él. "Yo en noviembre ya tenía teléfono y quedo con este chico. Entonces mi hermano llama a mi madre y le cuenta que yo había visto un chico", comenzaba explicando Isa sobre aquel capítulo. "Mi madre me miró y me insultó porque ella supo que yo había llevado a un chico a casa de mi hermano sin su consentimiento", confesaba, sin poder parar de llorar.
"Realmente el cabreo de ella era por el teléfono, porque lo otro ya había pasado. Yo lo tenía metido en unas botas de pelo y sabía que no lo iban a encontrar. Lo primero que me salió fue decir que no lo tenía y ella me insistió", contaba. "Empezó a zarandearme y como ve que no le voy a dar el teléfono le dijo a una amiga que le diera las tijeras de la cocina. Yo empiezo a dar vueltas en la mesa, ella en una esquina y yo en otra. Yo pensé que no me iba a cortar, pero la vi capaz, vi tanta rabia...", narraba.
Unas palabras que Lequio ha sentenciado. "Para mí lo del corte de pelo es un acto muy cultural, pero el peor papel es el de la fulanita que va a buscar las tijeras, porque ser padre o madre te puede provocar momentos irracionales, pero la gente que te rodea tiene que devolverte a la cordura", ha dicho contundente.
Y ha ido más allá, atacando directamente a quien le acercó las tijeras a la tonadillera: "Una de esas siervas de Isabel Pantoja es la auténtica hija de p***".
Eso sí, sus compañeros han dejado claro que, de una manera u otra, es totalmente "injustificable" lo que Isa vivió en Cantora. Tanto que Alejandra Rubio ha confesado que aunque no conoce personalmente a Kiko y no sabe cómo reacciona, "si fuera yo, estaría muerto de vergüenza en mi casa" tras todo lo que ha contado Isa.