Este próximo domingo 12 de marzo la corte hachemita se viste de gala para celebrar la boda de la princesa Iman,  la mayor de las dos hijas de Abdalá y Rania de Jordania, con el exitoso hombre de negocios de ascendencia griega Jameel Alexander Thermiotis. Pocos detalles han trascendido del enlace, pero ya han comenzado las celebraciones con una fiesta a la que ha acudido la novia, la orgullosa madre y muchas de las mujeres de la familia real jordana. Aunque la joven Iman es la gran protagonista estos días, no hay duda que la reina Rania también acapara todas las miradas cuando hablamos de estilo.

Estamos deseando ver el look que la soberana hachemita elegirá para el gran día de su hija, pero para ir abriendo boca ya nos ha dejado el primer gran estilismo en la fiesta con la que comenzaron estos días de fastos previos al enlace.  Siguiendo la tradición de los enlaces musulmanes, la princesa ha participado en la fiesta de la henna, donde ha estado acompañada por las mujeres de la familia y sus amigas más íntimas. Y Rania, como hacen las madres en estas ocasiones, se ocupó de todos los detalles: "Los toques finales antes de la fiesta. ¡Tanto amor en una habitación! Con amigos y familia en la fiesta de Henna de Iman", escribió en sus redes sociales.

El vestido tradicional de Rania de Jordania

No es ninguna novedad que Rania es una de las mujeres más elegantes del mundo, que trasciende de la realeza. Para el recuerdo queda el conjunto de falda y camisa, de Givenchy, que lució en la boda de los entonces Príncipes de Asturias, que ha pasado a la historia de la moda. Para esta fiesta prenupcial recurrió a la tradición luciendo un maravilloso traje de gala con un vestido en tonos rosa y vino, con falda de gasa y abrigo bordado. Sin apenas joyas y con su melena al viento, la esposa de Abdalá volvió a coronarse como la más elegante. El traje de Rania fue muy similar al que lució su futura nuera Rajwa Al Saif, que el 1 de junio  se casará con el príncipe heredero jordano Hussein. 



Rania de Jordania
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La princesa Iman fue la única vestida de blanco. Lució un vestido de manga larga bordado con flores blancas y cristales dorados de gasa de seda, de la colección nupcial 2021 de Reema Dahbour de corte árabe. Le añadió el cinturón bordado y con perlas, que también llevó su madre en su boda en 1993, y que la propia Rania se encargó de colocarle.