La muerte de Marta Chávarri con solo 62 años ha conmocionado al mundo del corazón. Llevaba décadas desaparecida de la vida pública, pero durante los años 80 y comienzos de los 90 fue la mujer más fotografiada del mundo social, en estrecha competencia con la que entonces era su cuñada, Isabel Preysler. Una rivalidad que también llevaron al mundo de la moda, convertidas en dos de las mujeres más elegantes del momento. En una década de excesos, donde las maxi hombreras, los volantes, las mangas abullonadas, los rasos y las perlas llenaban los armarios de las "mujeres bien", ellas fueron las reinas indiscutibles.
Marta se casó con Fernando Falcó en 1982 y se convirtió entonces en una jovencísima marquesa de Cubas. Comenzó desde ese momento a ser una habitual de las grandes fiestas y actos sociales, donde deslumbraba con sus vestido cortos con hombreras exageradas, mangas abullonadas y drapeados o con los trajes brocados con collares de perlas. Toda una influencer de la época como hoy en día lo es su nuera, Isabel Junot.
En 1988 fue nombrada Lady España, un título que reconocía a las mujeres con estilo de la alta sociedad, y que ella recibió de manos de la duquesa de Alba luciendo un vestido blanco con bordados en 3D, muy de la época.
La evolución del estilo de Marta Chávarri, de los excesos de los 80 a la sobriedad de los 90
El estilo de Marta competía directamente con el de Isabel Preysler, también esclava de una moda excesiva y recargada, que desde el prisma actual ponía años encima. Pero con la llegada de la nueva década, su divorcio de Fernando Falcó y su nueva relación con Alberto Cortina, el estilo de Marta Chávarri también dio un giro y se fue depurando. Convirtió los vaqueros rectos, los jerséis de cuello cisne y la blazer entallada en su uniforme y en el de todas las "chicas pijas" de Madrid. Y cuando llegaba el verano, cambiaba el clásico jean azul por los vaqueros blancos y las básica camiseta, también casi siempre en blanco.
Si hablamos de complementos, los botines en invierno y las sneakers en verano eran sus must y en sus manos, siempre los bolsos más exclusivos. Ella representaba mejor que nadie esa tendencia Old Money, que hoy ha vuelto a estar de moda. Lucía los bolsos de Louis Vuitton, Bottega Veneta o Hermès, el lujo con mayúsculas, pero sin hacer ostentación con los logos.
Cuando llegaba el verano en Marbella o Palma de Mallorca, un bañador liso de camiseta (al más puro estilo Los vigilantes de la playa), un pareo muy corto y unas zapatillas de deporte blancas, la convertían en la más estilosa.
Su melena rubia: la seña de identidad de Marta Chávarri
Lo que se mantuvo intacto a lo largo de los años fue su perfecta melena rubia, una de sus señas de identidad, y sus gafas de sol, de las que no se separaba. Marta Chávarri fue desapareciendo de la vida pública, cansada de tanta exposición, pero en las pocas ocasiones que la pudimos ver posteriormente continuaba manteniendo esa importan de mujer elegante y con mucho estilo. Seguía fiel a sus pantalones vaqueros y a su estilo sport chic.
En una época en la que las redes sociales no habían llegado a nuestras vidas, Marta Chávarri puede considerarse una auténtica it girl, como hoy lo es Tamara Falcó, que en plena luna de miel se ha enterado de la triste noticia del fallecimiento de la madre de su primo favorito.