Pensábamos que después de una primavera y un verano repleto de bodas, que se habían aplazado con motivo de la pandemia, ya tendríamos que esperar hasta la próxima temporada para volver a ver el desfile de invitadas celebrities luciendo sus mejores galas y llevándose más miradas que la propia novia. Pero no. En pleno mes de diciembre los 'sí, quiero' continúan. La última boda ha tenido como invitada a Irene Rosales, con un look espectacular, que ha despertado las alabanzas de todas sus fans.
La mujer de Kiko Rivera se decantó por un estilismo elegante y sofisticado, con el que, sin duda, fue una de las invitadas mejor vestida. En una boda de tarde-noche el traje largo es una de las prendas infalibles entre las invitadas y esa fue la elección de la excolaboradora de Viva la vida para triunfar.
El look de boda perfecto lo tiene Irene Rosales
Irene lució un vestido largo con una pequeña cola en rosa empolvado drapeado, con cuello perkins y manga ligeramente abullonada con gran puño, de la firma Victoria. Un modelo, que a pesar de las pinceladas de tendencia, tiene un toque clásico que nunca pasa de moda y tiene todas las claves para estilizar la figura. La influencer lo combinó con complementos en el mismo tono: una estola de pelo, que llevaba colocada de forma muy original a modo de banda, unos zapatos con plataforma y un clutch joya, de la firma Mibúh. Incluso para los pendientes también se decantó por un diseño largo de dos piedras en el mismo tono que el resto del conjunto.
En cuanto al look beauty, llevó un recogido muy sencillo con una coleta baja. raya al lado y varios mechones sueltos, dando un toque de lo más desenfado. El maquillaje, también coordinado con el vestido, en tonos rosados y melocotón, dando a la mirada una mayor profundidad, enmarcada con el eyeliner.
El resultado fue un estilismo perfecto para un boda de invierno, una época menos habitual para este tipo de celebraciones y en la que nos resulta más complicado acertar con el look. Irene ha dado en el clavo al elegir el tono empolvado para alegrar los días más grises y el detalle de la estola de pelo, con la que puso el punto sofisticado a un look aparentemente sencillo.
Retirada de la televisión y centrada en su faceta de influencer
Los constantes conflictos de su familia hicieron que Irene Rosales decidiera poner punto y final a su trabajo en televisión. Ahora su actividad profesional está centrada en las redes sociales, donde, con más de 677 mil seguidores, lleva camino de convertirse en una de las influencers más destacadas de nuestro país.