Este año, la alfombra roja de los Premios Oscar 2025 quedó marcada por el talento español. Las actrices nacionales no solo conquistaron el Dolby con su talento, sino que también dejaron una huella imborrable en la moda con estilismos impecables que dieron cuenta de que no nos falta savoir-faire. Ana de Armas, Penélope Cruz y Paz Vega encabezaron la lista de las más deslumbrantes de la noche y lo hicieron apostando por piezas de alta costura que, sin duda, estaban impregnadas de la esencia de cada una de sus personalidades.
Ana de Armas brilla en los Premios Oscar 2025 con un vestido de Louis Vuitton
(Gtres)
Ana de Armas: un tributo al glamour de Hollywood con Louis Vuitton
La actriz es desde hace años embajadora de Louis Vuitton y, como era de esperar, volvió a demostrar por qué es una de las actrices españolas mejor vestidas de la industria. La intérprete de origen cubano optó por un vestido negro de inspiración old Hollywood, con un escote halter de pedrería que evocaba el esplendor de las divas de los años dorados del cine. La silueta, de corte sirena y en crepé de seda, acariciaba su figura con una precisión milimétrica. Se veía espectacular.
El detalle más impactante del vestido estaba en su escote: una cascada de cristales dispuestos en una suerte de malla que se fundían con su piel. Para completar el look, Ana apostó por una melena suelta con ondas ligeras, unos pendientes de diamantes -también de Louis Vuitton-, mientras que el maquillaje se centró en una piel luminosa y labios en un tono nude muy favorecedor. Un look que, sin duda, consolidó su estatus como referente de estilo en la alfombra roja.
Penélope Cruz arrasa en los Oscar 2025 con un vestido de Chanel de inspiración helénica
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Penélope Cruz: la musa de Chanel deslumbra en clave helénica
Si hay alguien que sabe brillar en los Oscar, esa es Penélope Cruz. La actriz española volvió a confiar en Chanel, casa de la que es embajadora y de cuyas lindes no se aleja demasiado para este tipo de galas. Su elección fue un vestido blanco impoluto de inspiración helénica, con drapeados estratégicos que realzaban su silueta de manera magistral.
El diseño, de escote halter que daba paso a una ligera capa de gasa que flotaba a su paso, transmitía una sensación etérea y majestuosa. Los detalles en pedrería que recorrían el cuerpo del vestido y añadían un punto de luz sin caer en la ostentación. Por otro lado, el milimétrico drapeado abrazaba su busto y daba paso a una falda holgada y con mucho movimiento. La esposa de Javier Bardem complementó el look con un peinado semirecogido con ondas sueltas y un maquillaje que destacaba su mirada. Recién bajada del Olimpo.
Paz Vega y su vestido de firma española en los Premios Oscar 2025
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Paz Vega: la sofisticación del binomio en un diseño de Roberto Diz
La intérprete se convirtió en una perfecta embajadora de la moda española con un vestido bimateria firmado por Roberto Diz. La actriz sevillana se decantó por un diseño que combinaba un corsé negro con bajo péplum y con aplicaciones de flecos brillantes que aportaban textura y dinamismo y que contrastaba con una falda en crepé negro de impecable caída y con bajo sirena.
El diseño triunfó gracias al juego de volúmenes y contrastes de materiales. Vega, siempre fiel a su estilo minimalista con un twist de vanguardia, optó por un peinado recogido con raya lateral y flequillo, acompañado de pendientes de diamantes que enmarcaban su rostro. Un conjunto que demostró que menos es más, cuando se ejecuta con maestría.
Karla Sofía Gascón: una aparición discreta pero impactante
Más allá de la alfombra roja, una de las presencias más comentadas de la noche fue la de Karla Sofía Gascón. La actriz, envuelta en la polémica en los últimos meses, optó por asistir a la ceremonia sin desfilar por la red carpet, evitando así alimentar debates innecesarios y levantar ampollas. Sin embargo, su elección estilística no pasó desapercibida.
Gascón confió en Saint Laurent para la ocasión, lució un vestido de terciopelo negro con escote asimétrico y completamente cubierto de cristales. Una elección sofisticada en la que la opulencia del brillo contrastaba con la sencillez de la silueta, aunque, quizá, nos hubiera gustado que se la jugara con un corte menos lineal.