Acaba de cumplir 73 años y lleva años lejos del papel couché y de los medios de comunicación en los que era habitual hace años. Famosa desde su nacimiento, Carmen Martínez-Bordiú, ha vivido siempre según sus normas rompiendo muchas veces con los estrictos convencionalismos que exigía la alta sociedad a la que pertenecía.
Sus amores, sus tragedias (como la temprana pérdida de su hijo mayor en un accidente), su vinculación con la realeza y su vida al completo, eran minuciosamente analizadas y formaba parte permanentemente de la crónica social de la época. Carmen ha sido una de las figuras más perseguidas por la prensa rosa de nuestro país y un personaje que despertaba admiración, críticas y envidias.
Sintra, la residencia de verano de la nobleza
La aristócrata se mudó en 2019 a esta encantadora ciudad portuguesa para alejarse del foco mediático y comenzar una vida más relajada con su pareja Timothy McKeague, 34 años menor que ella, hasta que rompieron el año pasado. Desde entonces Carmen Martínez-Bordiú disfruta de la soltería en esta apacible localidad de la costa del país vecino.
La ciudad de Sintra fue conocida como la residencia de verano de la nobleza y la realeza portuguesas, ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y, actualmente, enamora a quien la visita por la opulencia de sus palacios, sus lujosas villas y el magnetismo arquitectónico de sus edificios. ¿Cómo no iba a conquistar a la que fue reina de corazones de nuestro país?
Está ubicada entre las colinas de Serra da Sintra y, en ella, podemos encontrar exuberantes bosques, colinas escarpadas, playas de ensueño y edificaciones de cuento de hadas. Es un entorno natural maravilloso lleno de historia, leyendas y rincones insólitos que bien merecen descubrir en una escapada. Se encuentra situada muy cerca de Lisboa, a menos de una hora en tren, así que no hay excusas para no conocer este mágico lugar si viajas a la capital lusa.
¿Qué visitar en Sintra?
Sintra es una ciudad de contrastes y sobre todo, llena de color y de luz. Hay muchos lugares que merece la pena visitar en este destino portugués que cada año recoge miles de visitantes por la belleza de sus parejas y su entorno privilegiado. Si viajas a Sintra no debes perderte:
El Palacio da Pena: Está ubicado en lo alto de una colina y tiene tanto encanto como misterio. La fachada del palacio tiene colores muy vivos y han restaurado su interior para que luzca tal cual estaba en 1910, cuando la nobleza portuguesa huyó del país.
Al ser tan llamativo, es el monumento más visitado de Sintra, una pequeña joya y uno de los que se consideran mejores palacios de Europa. Junto a él se construyó un magnífico parque inglés y se ha convertido en todo un ícono de la arquitectura portuguesa. Imprescindible.
Quintada da Regaleira: Los amantes de la arquitectura más oscura y enigmática van a adorar esta mansión neogótica, aunque lo que verdaderamente llaman la atención son sus jardines repletos de pasadizos secretos, simbolismo e incluso un pozo de iniciación para caballeros templarios. Una visita realmente mística.
Seguimos de ruta por la colorida Sintra
El Palacio Nacional de Sintra: Es el palacio medieval original de la ciudad de Sintra que utilizaban los que fueron primeros gobernantes en el país.
El Castelo dos Mouros: Está pegadito al Palacio da Pena en la sierra de Sintra. El castillo fue levantado por los árabes en los siglos VIII y IX como fortaleza defensiva debido a su enclave estratégico. Es una para obligatoria si visitas la ciudad lusa.
Palacio de Monserrate: Se trata de una villa de inspiración árabe con jardines en calma lejos del bullicio turístico de otros puntos clave de la ciudad. Se construyó a mediados del s.XIX como residencia del verano para el aristócrata Francis Cook y su familia. Te enamorarán sus trabajadas celosías, sus elementos góticos, moriscos y orientales, además de su espectacular jardín botánico.
Playas: Con todas seguridad una de las cosas que enamoró a Carmen de Sintra, además de su pasado aristocrático, fueron sus playas. Las playas de esta ciudad portuguesa son magníficas y con grandes olas, no hay que olvidar que estamos en el Atlántico. Podrás hacer sur en la playa de Guinche, disfrutar de la salvaje Praia da Ursa, nadar en Praia Grande y visitar la población costera (y pueblo balneario) de Praia das Maçãs.
La fascinación que ejerce Portugal
La gastronomía portuguesa también es un buen motivo para visitar el país vecino y ¿por qué no? Hacer como Carmen e instalarnos allí como retiro. En Sintra es famoso su arroz caldoso con mariscos que lleva gambas, mejillones y calamares, una auténtica delicia.
Las queijadas de Sintra son un dulce típico de la zona que, aunque a primera vista puedan recordar a los famosos pastéis de Belém, en realidad son unos pequeños pasteles de queso fresco, unas mini tartas de queso con base crujiente y un relleno dulce y suave. Una maravilla. Son el mejor bocado para degustar paseando por las calles empedradas de la ciudad.
Por último, no dejes de probar el famoso vino de Colares para acompañar estas delicatessen. Los vinos de Colares cuentan con Denominación de Origen y son producidos en viñedos cercanos a Sintra. Tiene un sabor único y es muy popular en la zona. Si en la cata añadimos de fondo un fado en directo, tenemos la velada redonda.
Lo tenemos a un paso y es un auténtico paraíso, por eso Carmen Martínez-Bordiú lo ha elegido como retiro. ¿Te animas a visitar este destino de ensueño?