Su paso por realities como Gran Hermano o Supervivientes le ha dado a Adara Molinero una gran visibilidad y se ha convertido en los últimos años en una figura pública televisiva muy reconocida.
La mediática ex azafata también ha sido noticia por sus relaciones amorosas, con Bosco Martínez-Bordiú, que terminó hace unos meses, y su nueva ilusión con Álex Ghita, su entrenador personal. La casa de Adara es digna de revista y ella ha compartido muchos de sus rincones en sus redes sociales.
Una casa luminosa en el norte de Madrid
Es uno de los rostros más populares de la televisión nacional y cuenta con 875 mil seguidores en Instagram. Hace menos de un año Adara se mudó junto a su hijo Martín a este pisazo situado al norte de la capital que cuenta con 110 metros cuadrados y de la que ella presume en sus redes. Un piso de estilo clásico pero minimalista donde el blanco y la luz transmiten calma y serenidad.
Al ser tan activa en sus redes, Adara ha compartido muchos de los rincones de su casa con su legión de followers. En la decoración abundan los tonos blancos y neutros con toques retro y materiales nobles que elevan la atmósfera de las estancias dándoles un toque más sofisticado y elegante.
Las casa cuenta con 3 habitaciones, una de ellas con vestidor, y dos baños. La cocina está abierta al salón y aporta amplitud y luminosidad a la casa. Las molduras, el suelo laminado y la barra de la cocina son detalles que hacen de este piso un espacio funcional, armónico y con mucha clase.
Un salón con materiales de primera calidad
Adara Molinero está muy orgullosa de su casa pero sobre todo de su salón que no ha dudado en mostrar a sus seguidores en un vídeo donde resalta la pared principal que es de piedra natural en tono gris oscuro con unas bonitas y delicadas vetas blancas.
A juego con la pieza central del salón, la pared de piedra natural, podemos ver elementos decorativos como jarrones que destacan en las estanterías integradas. La mesa central frente al comodísimo sofá es de cristal con estructura en color dorado. La mesa de comedor es robusta y elegante, de madera de roble y cuenta con butacas en color crudo que le dan un toque moderno que rompe con la seriedad y clasicismo de la madera.
Cocina abierta con barra
En la cocina encontramos una barra americana en mármol blanco con unos taburetes altos con asientos en marrón que permiten desayunar, picotear o tomar un café tranquilamente sin necesidad de utilizar la mesa del comedor.
Los armarios hasta el techo aseguran un buen almacenaje, una cocina muy moderna que contrasta con las molduras clásicas que recubren la columna donde se sostiene la barra.
Atención a los detalles
A Adara le gusta incluir elementos clásicos y vintage en su casa. Grandes espejos en dorado envejecido, mármol, madera… la influencer sabe fusionar de maravilla el estilo más clásico con la elegancia más moderna y sofisticada.
El dormitorio y vestidor de Adara
El dormitorio principal cuenta con un vestidor adjunto donde la ex modelo guarda todas sus prendas en orden para mantener así organizada la casa y tener todo en su sitio. Es uno de los puntos más importantes de la casa para Adara a quien le gusta compartir sus looks y estilismos con sus seguidores y suele hacer vídeos probándose sus nuevas adquisiciones de moda.
La habitación principal cuenta con paredes blancas, mesilla de noche blanca, apliques de luz blancos y juego de cama en color blanco inmaculado pero ha querido romper la decoración con un cabecero de corte clásico en tono azul, un color que invita al descanso y a la relajación. Los apliques y detalles dorados que la influencer ha añadido en su habitación favorecen ese toque elegante de la estancia.
Un baño de lujo
En el baño de Adara volvemos a encontrar toques de dorado en los espejos y grifos. Cuenta con dos bonitos lavamanos en blanco sobre una encimera de madera y ha optado por una ducha con una elegante mampara de cristal enmarcada en negro.
Una habitación infantil adorable
La habitación del pequeño Martín tiene una cálida atmósfera infantil, ideal para sus juegos y para desarrollar su imaginación.
Una cama en forma de casita con banderines de colores, muy baja para que Martín pueda subir y bajar de ella sin dificultad, suelos de madera laminada, un cojín para jugar en el suelo, estantes con sus juguetes, doble cortina para impedir el paso de la luz y unas molduras azuladas en las paredes, hacen de este espacio uno de los más especiales de la casa.
Una casa donde Adara Molinero comparte su día a día y su vida con su hijo, pensada hasta el último detalle y donde la claridad y los elementos vintage juegan un papel primordial.