Durante esta semana no se ha hablado de otra cosa que no haya sido el peculiar pero natural gesto que tuvo la Reina Letizia durante la tradicional recepción con el Cuerpo Diplomático acreditado en Españael pasado jueves, 1 de febrero, en el Palacio Real. Durante el protocolario besamanos, a la monarca se le cayó la pulsera que llevaba y se agachó con total naturalidad para recogerla. Un gesto que ha cuestionado el protocolo de los Reyes ante este tipo de situaciones, pero en donde realmente se han centrado todas las miradas han sido en la joya que llevaba Doña Letizia: ¿de dónde es? Y, sobre todo, ¿cuánto cuesta?
La pulsera de la Reina Letizia supera el valor de 30.000 euros
Mucho se ha hablado sobre el origen de esta joya. Se trata de una pulsera de brillantes, perlas y zafiros que supuestamente los Reyes Juan Carlos y Sofía le regalaron con motivo de su pedida de mano con Don Felipe en noviembre de 2003. La primera vez que la lució fue en el banquete previo a su boda, celebrado en el Palacio de El Pardo, el 21 de mayo de 2004. También se ha especulado mucho sobre si realmente fue un regalo de su marido. Lo que sí que está claro es que en su momento pertenecieron a la Reina María de las Mercedes, primera esposa del Rey Alfonso XII. Y que su valor es mucho más que sentimental: podría costar nada más y nada menos que 30.000 mil euros.
Según los expertos que ha podido consultar SEMANA, son joyas muy parecidas a las de Joyería Suarez y Del Páramo. Sus precios rondan entre los 29 y 34 mil euros, pero la pulsera que lucía la Reina el otro día en el acto de la Casa Real estaría por encima de este valor. Su pulsera es muy parecida a estas, en las que destacan por sus diamantes y zafiros en tonos azulados. En esta ocasión, Doña Letizia ha rescatado este juego con pendientes y collar con perlas y zafiros veinte años después de que le viéramos por primera vez, y lo ha combinado con un vestido largo y de mangas en un tono parecido de azul.
La anécdota de la caída de la joya de la Reina Letizia ha copado los titulares de los medios
Lo cierto es que la anécdota de la caída de su pulsera dio mucho de qué hablar. El cierre de la joya se le soltó y se fue deslizando hasta caer por completo, por lo que Doña Letizia tuvo que rescatar la pulsera del mismo suelo. Para ello, se agachó ella misma a los pies del Rey Felipe, dando lugar a una imagen curiosa, pero de lo más natural. En ese momento, el monarca se mostró un poco perplejo y ajeno al incidente. Ajena a protocolos y sin dejar de sonreír, la reacción de la Reina ha sido de lo más normal.
Una vez recuperada la pulsera, la soberana intentó abrochársela por sí sola, lo que era harto difícil, por lo que se la pilló en un pequeño aparte comentándoselo a Don Felipe, ante la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El Rey finalmente ayudó a su esposa a ajustarse de nuevo la pulsera en su muñeca, zanjando así un pequeño susto dado el alto valor de la alhaja. Así las cosas, no es la primera vez que esto le sucede.
Ya en la Pascua Militar de 2022, en la que, por cierto, la soberana estrenó el mismo vestido azul que lucía en esta cita, tras la interpretación del Himno Nacional se le desprendió el broche de perlas y diamantes que llevaba en el pecho. En aquel momento el Rey Felipe se dio cuenta y se agachó a recoger la joya de una forma muy caballerosa.