La Reina Sofía fue la protagonista indiscutible del concierto benéfico a favor de la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL) que tuvo lugar en el Teatro Real de Madrid en el marco de la entrega del Premio BMW de pintura. La madre de Felipe VI acudió en compañía de su hermana Irene de Grecia, su persona incondicional y de la que no se separa, menos desde que salió a la luz la pérdida de memoria que sufre. 

La reaparición de Irene de Grecia ha desatado la preocupación en torno a su estado de salud. A sus 82 años, el deterioro físico de la hermana pequeña de la Reina Sofía (86 años) es más que evidente. 

Las últimas apariciones de la hermana de la Reina Sofía que han generado mucha intranquilidad

No es la primera vez que el estado de salud de Irene de Grecia preocupa. El pasado mes de julio, una de las últimas veces que se ha dejado ver en un acto público, fue la prensa francesa la que dio la voz de alarma por su situación. La inquietud que genera la salud de la hermana pequeña de la Reina Sofía fue en aumento después de que salieran a la luz unas imágenes de Irene acudiendo en silla de ruedas al citado evento, celebrado en la isla de Creta, con motivo de la inauguración de una exposición dedicada a Pablo Picasso. 

La reacción de los ahí presentes al verla fue unánime, como relató en ese momento el 'Point de Vue' de Francia. Acostumbrados a la fortaleza de la hija del rey Pablo y la reina Federica, de 82 años, impactó y mucho su fragilidad notoria. La Reina Sofía, también presente en el acto, no se separó de su hermana, demostrando una vez más su incondicionalidad. "Lo que atrajo poderosamente la atención fue el estado de salud de la princesa Irene, visiblemente impedida. La tía de Felipe VI apareció por primera vez en silla de ruedas, sostenida por una mujer de compañía", señaló el citado medio. 

Irene de Grecia en el Teatro Real.

Irene de Grecia en el Teatro Real. GTRES

El último plan de Irene de Grecia y la Reina Sofía en el Teatro Real de Madrid

Lo cierto es que la reparación pública de Irene de Grecia no ha menguado la preocupación en torno a su estado de salud. En cambio, ha ido en aumento. La tía del Rey Felipe VI se dejó ver en el Teatro Real de Madrid este pasado domingo, junto con la Reina Sofía, a quien acompañó para presidir el concierto de Navidad del premio BMW de pintura. Las dos hermanas acudieron muy conjuntadas, cada una con su propio estilo. Doña Sofía se decantó por un conjunto de dos piezas satinado, compuesto por una chaqueta abotonada con solapas, hombreras marcadas y estampado Paisley, y un pantalón de corte recto, con el color verde caqui como gran protagonista. Zanjó el look con un minibolso y zapatos a juego.

En el caso de Irene de Grecia, optó por una vestimenta mucho más discreta, con una camisa del mismo color caqui por el que apostó la Reina, pero, con detalles de flores en blanco, y pantalones rectos negros. Dicen quienes estuvieron presentes en el acto, que doña Sofía no le quitó ojo a su hermana, de la que estuvo pendiente en todo momento y preguntándole para conocer cómo se encontraba. Las dos mujeres fueron recibidas entre aplausos a su llegada al palco del mítico teatro, desde donde presidieron el concierto.  

a pérdida de memoria de la hermana de la Reina Sofía que le impide reconocer a sus seres queridos

A finales del pasado mes de octubre, Irene de Grecia acaparó la actualidad mediática después de desvelarse que había perdido parte de la memoria a consecuencia de su importante deterioro cognitivo. Es lo que se conoce como "el mal del olvido", apuntó entonces la periodista María Nikolaou, que "le ha borrado de un plumazo ciertos recuerdos y hasta los rostros de sus seres queridos". Desde ese momento, la hermana de la emérita afronta un diagnóstico poco alentador porque se trata de una condición que no se puede revertir y, con la edad, sobre todo cuando esta es avanzada, va a más, no a menos. 

La realidad que vive la también tía de la Infanta Elena y la Infanta Cristina ha provocado que la Reina Sofía se vuelque completamente con ella, comprometida con su cuidado y atención y tratando de hacerle el día a día más llevadero. De acuerdo con varias fuentes, fue la emérita la primera en darse cuenta de esta pérdida de memoria de Irene de Grecia. No es de extrañar, tampoco, dado que las dos mujeres viven juntas desde 1981 en una residencia privada dentro del complejo residencial de la Zarzuela.

Debido a que la hermana de doña Sofía no pertenece a la familia real, los responsables de Palacio no han dado ninguna información sobre su estado de salud más allá de lo que ha trascendido.