Se trataba de un feliz acontecimiento familiar, el cumpleaños de la pequeña Erin, fruto de la relación de Telma Ortiz con el irlandés Robert Gavin, aunque un suceso inesperado provocó que las cosas se complicaran. La anfitriona era Telma, que había organizado un almuerzo al que acudieron sus padres, Jesús Ortiz y Paloma Rocasolano, acompañados por sus respectivas parejas, Ana Togores y Marcus Brandler. Y es que, a pesar de su divorcio, el exmatrimonio sigue manteniendo una estupenda relación. Una buena sintonía que también comparten Ana y Marcus, muy integrados en la familia. Sin embargo, un hecho alteró el tranquilo plan familiar, ya que, tras el almuerzo, alrededor de las 18:00 h del pasado 19 de agosto, los padres de la Reina Letizia salieron de la casa y se montaron en un coche juntos para ir al Hospital de la Paz, donde les esperaba su nieta Carla Vigo, hija de la fallecida Érika Ortiz.
Carla Vigo, apoyada por sus abuelos
Las imágenes han visto la luz este miércoles en la revista SEMANA, fotos que demuestran cuál es su relación en la actualidad y de las que podrás ser testigo si corres a tu kiosco y adquieres el último número de la revista. Acompañada de una amiga, la joven abandonaba el centro hospitalario al que había acudido por Urgencias y donde había permanecido unas tres horas. Con el rostro serio, gesto triste y el informe médico en la mano, Carla recibió muestras de cariño por parte de sus abuelos y, en especial, de su abuela, que le abrazaba y acariciaba la cara con cariño, antes de despedirse de ella en la puerta de su casa. Lo cierto es que Carla no está atravesando su mejor época en los últimos tiempos. Según ha confesado ella misma, a algunos desengaños amorosos y profesionales, se unen ciertos problemas de salud, como la bulimia que ha reconocido que padece desde su infancia. Un trastorno alimenticio al que se está enfrentando con el apoyo de sus amigos y de su familia.