Tras pasar unos días en Tenerife, el buque escuela Juan Sebastián Elcano puso rumbo este mismo lunes en la tarde a Gran Canaria, donde ha llegado en la mañana del martes 21 de enero. La embarcación ha atracado en el Arsenal de Las Palmas con la Princesa Leonor a bordo y con fuertes medidas de seguridad. A pesar de que desde Casa Real quieren "normalidad" y que la heredera al trono sea una guardiamarina más, no es una tarea fácil tanto para la Armada como para la propia seguridad de la Casa del Rey. 

De hecho, sin ir más lejos, este lunes embarcaba de nuevo en el buque escuela con pequeños "privilegios" que no tuvieron sus compañeros. Para empezar, la Princesa Leonor llegó en un coche con su escolta cuando el resto de los guardiamarinas ya se encontraban en las inmediaciones del Juan Sebastián Elcano desde hace horas. Por otro lado, también lo hacía portando una maleta. A pesar del reducido espacio que tienen en los camarotes, la futura Reina del país llevó más enseres personales, mientras que el resto de compañeros continúan con el equipaje que llevaron el primer día, cuando embarcaron en el puerto de Cádiz. Unos pequeños gestos que confirman que, a pesar de las intenciones de que sea una más y no tenga privilegio alguno, es la heredera a la Corona de nuestro país. 

La Princesa Leonor, a su llegada a Gran Canaria

La Princesa Leonor, a su llegada a Gran Canaria

Gtres

La Princesa Leonor ha llegado a Gran Canaria junto al resto de sus compañeros guardiamarinas

Como decíamos anteriormente, este martes el buque escuela con sus 76 guardiamarinas llegaba al puerto de Las Palmas con la Princesa Leonor a bordo. Este es el último puerto español antes de que la embarcación comience la travesía y ponga rumbo a continente americano. Sin lugar a dudas, una gran experiencia para todos los estudiantes que están a bordo del importante barco. A la llegada, y como ya vimos en Tenerife, la tripulación al completo se encontraba distribuida a lo largo de la cubierta del barco, mirando al puerto y saludando a su llegada, quitándose los típicos gorros que lucen. Una vez ya en tierra, se han formado antes de partir a su primer destino en la isla.

Debido a las agradables temperaturas de las Islas Canarias a lo largo de todo el año, todos los guardiamarinas han lucido el uniforme de verano, que está compuesto por pantalón blanco y camisa de manga corta al mismo tono. Además, destacaba el sombrero bicornio, o sombrero de dos picos, que es una de las piezas que forman parte del uniforme de gala naval, que además tiene detalles dorados y el escudo de la Armada Naval. 

El saludo a tierra de los guardiamarinas del Juan Sebastián Elcano

El saludo a tierra de los guardiamarinas del Juan Sebastián Elcano

Gtres

El pequeño problema que ha tenido la Princesa Leonor con su saludo a tierra

Ha sido precisamente con ese característico accesorio con el que la Princesa Leonor ha vivido un momento 'tierra trágame'. Es habitual que una vez que lleguen a puerto, saluden a tierra agitando el sombrero con su mano derecha en alto. Pues bien, la Princesa Leonor lo ha hecho como el resto de guardiamarinas. Sin embargo, a la hora de colocárselo sobre la cabeza ha tenido ciertos problemas y se le ha complicado fijarlo en la posición correcta. De hecho, en un primer momento, la heredera al trono incluso ha tapado sus ojos. 

Leonor, de manera muy ágil, ha tenido que reajustarlo de manera rápida para así dejarlo en la posición correcta, mientras miraba hacia sus compañeros para fijarse si el sombrero estaba bien colocado o no. Un pequeño desliz que estamos seguros de que le pasa a más de un guardiamarina, pero que, sin embargo, no tiene todos los ojos fijados en él. 

 

La Princesa Leonor se despide de sus padres a bordo de Elcano

La Princesa Leonor se despide de sus padres a bordo de Elcano. ROBERT SMITH

La Princesa Leonor ya sufrió un apuro durante su despedida desde el puerto de Cádiz

No es la primera vez que la Princesa Leonor tiene un problema con su sombrero. El día que embarcó en el puerto de Cádiz con la presencia de sus padres, también tuvo un pequeño error que no pasó desapercibido por los expertos. A la hora de agitar el gorro para despedirse de todos los presentes en el puerto, lo hizo con la mano izquierda en lugar de la derecha. Sin embargo, pronto su compañera que tenía al lado se dio cuenta y avisó a la primogénita del Rey Felipe VI que lo estaba haciendo de manera errónea para que corrigiera así su postura. 

A pesar de ese detalle, eso no ensombreció la despedida y, con una sonrisa de oreja a oreja, la Princesa Leonor comenzó su travesía a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano. Una travesía que durará un total de 110 días, frente a los 140 de sus compañeros, y que recorrerá algunos países como Brasil, Uruguay, Chile, Perú o Colombia, entre otros destinos. A su regreso, seguirá con su formación militar en la Academia General del Aire de San Javier, en Murcia.