La Infanta Cristina acaba de cumplir 58 años (el 13 de junio) y se encuentra en un momento clave de transformación personal. Está a punto de firmar su divorcio de Iñaki Urdangarin, cosa para la que habrían esperado a que la menor de sus cuatro hijos, Irene, cumpliera la mayoría de edad (lo que sucedió el pasado 5 de junio). Desde ese instante, Cristina será una mujer 'libre' y pondrá fin a casi 25 años de matrimonio. Desde que se separara hace más de un año y medio, la Infanta no ha rehecho su vida sentimental (a diferencia de Iñaki, cuya infidelidad se destapó tras ser fotografiado en una playa de la mano de Ainhoa Armentia, entonces su compañera de trabajo en un bufete de abogados de Vitoria), pero su 'nueva' vida delata una felicidad reencontrada. Guapa, en forma y sonriente... Para ello sus hijos son fundamentales y estos acaban de mostrarle todo su apoyo con una divertida escapada a Córdoba.
Juan, Pablo, Miguel e Irene Urdangarin ya son mayores y, pese a todo el revuelo mediático alrededor de la ruptura de sus padres, han sabido mantener el tipo bastante bien. Discretos y muy educados, los jóvenes han demostrado un saber estar encomiable dada su difícil situación, después de soportar el ingreso en prisión del patriarca y la posterior separación de la pareja. El hecho es que ahora las aguas están volviendo poco a poco a su cauce en la familia. Mantienen una buena relación tanto con su padre como con su madre y son respetuosos con ambos.
Eso sí, el último cumpleaños de la Infanta Cristina ninguno ha querido perdérselo, arropándola en un momento tan especial. Ante este estado de las cosas, la hija mediana de los Reyes Juan Carlos y Sofía ha decidido celebrarlo por todo lo alto. Nada de esconderse. Aunque vive en Ginebra (Suiza), sus viajes a España son cada vez más frecuentes. Para su aniversario ha organizado una escapada a Córdoba con sus cuatro hijos haciendo un esfuerzo por reunirse, y más teniendo en cuenta que algunos estudian y trabajan fuera de España. Pero todos han disfrutado de la ciudad andaluza a fondo y esta es su ruta completa.
Un fin de semana, del viernes 8 al domingo 10 de junio, donde se dejaron ver en divertidos planes. La Infanta Cristina cenó con su hijo mayor y su hija menor en el restaurante Casa El Pisto, donde degustaron pisto y rabo de toro y hasta se hicieron varios 'selfies' con los dueños y otros comensales. Los testigos han destacado que fueron muy amables y estaban muy relajados.
Al día siguiente, la Infanta y ya con sus cuatro hijos visitaron las Caballerizas Reales de Córdoba, toda una reliquia de la ciudad y que demuestra la pasión por los caballos de la Familia Real. La propia institución compartía una imagen del grupo con este mensaje: "Haciendo muestra de su magnífica educación y saber estar, la familia Borbón ha conocido nuestras instalaciones y proyecto, culminando su visita con espectáculo ecuestre 'Pasión y Duende del Caballo', ocasión para la cual nuestros jinetes han lucido su traje de gala".
La familia continuó ruta reponiendo fuerzas en otro de los templos gastronómicos de Córdoba: el restaurante Ermita de La Candelaria, regentado por Javier Campos, quien les recibió con los brazos abiertos. La Infanta y sus hijos disfrutaron de un almuerzo privado en esta antigua ermita del siglo XV reconvertida, donde no faltan clásicos platos como los flamenquines, el salmorejo y la ensaladilla. Este es un local conocido por la Familia Real española. Sin ir más lejos, el pasado abril sirvió el cátering durante la visita de la Reina Letizia para un acto de los Premios Princesa de Girona.