Las vacaciones en Mallorca no están siendo precisamente pródigas en apariciones de la Familia Real. Pero hoy ha saltado una bonita sorpresa. Sorpresa porque no estaba anunciada en la agenda oficial. Y es que la Reina Letizia y sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, al fin han salido del palacio de Marivent y han visitado el Real Club Náutico de Palma. Esto siempre ha sido uno de los fijos durante su estancia en la isla: recorrer las instalaciones, saludar a personal y amigos y, por supuesto, posar en el pantalán junto al Aifos para desear suerte al Rey Felipe en las regatas.
Ha habido que esperar hasta la última jornada de la Copa del Rey Mapfre de Vela para poder verlas en este punto clave de la vida social y deportiva mallorquina. Y además les ha llevado otro feliz motivo, pues han rendido un homenaje al regatista menorquín Joan Cardona por su medalla de Bronce lograda en los Juegos Olímpicos de Tokio.
Los Reyes y sus hijas le han saludado protagonizando un simpático momento al chocar sus puños. También le han aplaudido por esa medalla más para la Vela española, una categoría emblemática para nuestro equipo olímpico. Los cuatro han charlado unos instantes con el deportista con gestos muy relajados. Y es cuando hemos sido testigos de algo tan natural como acercarse a tocar el metal... ¡No siempre se tiene a la mano una medalla olímpica!
La Princesa Leonor y la Infanta Sofía la han sostenido en sus manos, mientras Joan Cardona, que la llevaba colgada al cuello, no podía más que sonreír ante una situación tan singular. Las chicas estaban maravilladas. Pero también Letizia, quien se ha mostrado muy curiosa y expresiva tomando la medalla y preguntando al laureado. La Casa Real está siguiendo al detalle la participación de nuestros deportistas en las Olimpiadas y a través de la cuenta oficial de Twitter no dudan en felicitar y alentarlos cada vez que nos dan una alegría.
A continuación, la Familia Real se ha dirigido al pantalán donde estaba atracado el Aifos 500, a cuya caña ha competido toda esta semana el monarca. Allí han posado de nuevo con Joan Cardona y el resto de la tripulación del barco. En esta ocasión, la Reina y sus hijas no han podido subir a bordo por respetar la 'burbuja Covid'.
Pero no han faltado los besos en la despedida (siempre con la mascarilla puesta) y los deseos de buena suerte para esta última jornada de regatas. Letizia, Leonor y Sofía han esperado a que el Rey soltara amarras con el Aifos rumbo al campo de regatas. Después las han atravesado el Real Club Náutico hacia la salida. Una visita breve, pero significativa, en lo que parece que ya es la recta final de su veraneo en Mallorca.