Mucho se ha hablado de la estricta dieta que sigue a rajatabla la Reina Letizia para mantener su cuerpo en forma. Muy preocupada por su físico y por mantener su salud a raya, la monarca se cuida y mucho. Sin embargo, de vez en cuando puede darse un capricho y saltarse el plan de alimentación indicado por su nutricionista. Sin embargo, si hay un plato que no falta en la mesa del Palacio de Zarzuela, incluso a pesar de lo rigurosa que es Letizia, es el jamón. Un buen jamón.
Los Reyes, Felipe y Letizia, son grandes amantes del jamón. Pero no de cualquier jamón. En el Palacio de la Zarzuela se consume el que está considerado, actualmente, como el jamón más caro del mundo. Así lo adelantaban el programa de CUATRO 'Tiempo al tiempo', quienes se han desplazado hasta un pueblo de Huelva y han hablado con uno de los productores de esta delicia para el paladar.
En Zarzuela se consume este espectacular jamón que es de lo más exclusivos. Se trata del cerdo ibérico manchado y tan solo existen 50 productores en el mundo. Uno de ellos ubicados en un pueblo de Huelva, que es donde Casa Real compra esta exquisitez con la que deleitan el paladar.
Los jamones que consumen los Reyes, Felipe y Letizia, pueden llegar a costar 12.000 euros
"Es una estirpe que está en peligro de extinción. Aquí en esta dehesa tenemos 40, pesan aproximadamente 180 kilos. Tienen una genética distinta a sus hermanos de capa negra, además, hacen 3 montaneras en vez de una. Es bueno que estén musculados para que el jamón salga mejor", revelaba el productor de estos jamones.
Los jamones que se encuentran en la despensa del Palacio de la Zarzuela no son aptos para todos los bolsillos. La pieza se vende desde los 4.800 euros y puede llegar a alcanzar hasta los 12.000 euros en subasta. Sin lugar a dudas, hay que desembolsar una cantidad ingente de dinero para degustar este jamón, por lo que tan solo las personas con muchos ceros en la cuenta bancaria pueden hacerlo.
La Reina Letizia y su suegro, el Rey Don Juan Carlos, comparten el gusto por este queso
Además de estos jamones exquisitos, Letizia también es fan del queso Romanones, un queso elaborado con leche pasteurizada de oveja, corteza blanca, tierna y comestible que contiene una delicada pasta, cremosa, pero compacta, con pedacitos de trufa negra traída desde Italia. Estos quesos son una receta de la aristocrática familia Romanones en su Finca Pascualete en Cáceres.
Estos quesos se venden en las tiendas gourmet más selectas del mundo junto a productos ecológicos del ya Rey Carlos III. La Reina Letizia no es la única fanática de este queso dentro de la Casa Real. El Rey Don Juan Carlos también es un gran admirador de estos quesos de Trujillo. Sin lugar a dudas, en Zarzuela los productos siempre son de excelente calidad.
La Reina Letizia ha hecho de la despensa de Zarzuela un lugar donde perderse. La llegada de Letizia a Palacio hizo que los menús que elaboraban los cocineros a diario se vieran modificados, eliminando los fritos y potenciando los productos ecológicos y de cercanía.
La bebida favorita de la Reina Letizia
Además del buen jamón y el queso, también hay un producto básico que no puede faltar en la nevera de los Reyes. La kombucha se ha convertido en la bebida favorita de la Reina Letizia. Una bebida que se ha puesto de moda entre los rostros más famosos de nuestro país y que se considera como una bebida saludable, con cierto sabor ácido, un té endulzado y fermentado con una base gelatinosa de microorganismos. Por muy loco que suene, a esta bebida se la conoce también como refresco de hongo manchuriano. Sus fieles seguidores, que no son pocos, aseguran que ayuda a las articulaciones y mejora la digestión.
La dieta que sigue Letizia desde hace años
De todos es conocido que la Reina sigue a rajatabla un plan de alimentación. Esta es la conocida como dieta Perricone, que promete ponerle freno al envejecimiento acelerado. Esta dieta no está únicamente vinculada a la pérdida de peso, sino que además se enfoca en reducir la inflamación y mejorar el aspecto de la piel. Esto podría explicar por qué la reina Letizia luce siempre una piel radiante.
Esta dieta se caracteriza por la amplia variedad de alimentos saludables en sus platos, destacando frutas, verduras, frutos secos, legumbres, proteínas animales, lácteos bajas en grasa, especias de todo tipo y, sobre todo, mucha agua.