El Rey Felipe prosigue sus vacaciones en Mallorca combinando algunos compromisos oficiales con otros fuera de agenda, mientras continúa regateando a bordo del Aifos 500. Este ha sido el caso de su aparición esta mañana. A primera hora ha acudido al Real Club Náutico de Palma para participar en un acto muy especial: un izado de bandera para conmemorar el 500 aniversario de la primera vuelta al mundo de Magallanes y Juan Sebastián Elcano. Con ello confirma su pasión por el mar y la navegación, que al fin ha podido retomar este verano tras dos años en dique seco.

El Rey Felipe ejerce de estrella del Real Club Náutico de Palma
Robert Smith.

Hasta la fecha ha sido Don Felipe el miembro de la Familia Real que más se ha dejado ver en público desde que el pasado sábado aterrizara con la Reina y sus hijas en la isla balear. Aparte del debut de Doña Letizia el pasado domingo (para clausurar el Atlàntida Mallorca Film Fest), el monarca está llevando todo el peso de este veraneo real.

El lunes recibió en La Almudaina a las autoridades de Baleares y ayer, martes, despachó en Marivent con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Aparte de esto, compite cada día en laCopa del Rey Mapfre, que se disputa durante toda esta semana en la bahía de Palma.

El Rey Felipe ejerce de estrella del Real Club Náutico de Palma
Robert Smith.

Después del breve acto del izado de bandera, para el que le han ofrecido una mascarilla negra para ir todos a juego, el Rey se ha reunido con sus compañeros del Aifos en el pantalán. Allí ha charlado amistosamente con algunas personas antes de prepararse para salir a regatear una jornada más.

El monarca empezó las regatas el pasado lunes al timón del Aifos 500, con el que espera ganar en su categoría. Lo ha cogido con muchas ganas después de la cancelación del torneo el año pasado a causa de la pandemia. De hecho, a su regreso a puerto tras esa primera jornada, Don Felipe dijo: "Poder volver a navegar es una maravilla".

El Rey Felipe ejerce de estrella del Real Club Náutico de Palma
Robert Smith.

Durante estos días, y después de salir al mar, el Rey ha aprovechado para relajarse junto a su tripulación en las instalaciones del Real Club Náutico, organizador de la Copa del Rey. Allí el ambiente es excelente, un bullicio entre deportistas, patrocinadores, prensa y otros invitados, quienes deben acceder al recinto con una pcr negativa hecha o pruebas de antígenos.

Es la parte social de un campeonato que hace brillar aún más a Mallorca. Y por ahora el Rey Felipe se ha convertido en la gran estrella. No es raro que comparta buenos ratos con sus compañeros tomando algo en el bar como uno más. También allí se han celebrado las últimas medallas conseguidas en Vela durante los Juegos Olímpicos de Tokio. El monarca parece disfrutar mucho con la camaradería en equipo alrededor de un deporte que le apasiona.

El Rey Felipe ejerce de estrella del Real Club Náutico de Palma
Robert Smith.

Se espera que estos días también pasen por el Real Club Náutico la Reina Letizia y sus dos hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. Así ha ocurrido en otras ediciones, en las que han visitado el pantalán y han deseado suerte a Don Felipe. Pero antes tenemos otra cita, y esta vez con la Familia Real al completo. Esta tarde los Reyes y sus hijas visitarán el centro de interpretación del paraje natural de la Sierra de Tramontana y el santuario de LLuc en Escorca (Palma). Será su primera aparición oficial en Mallorca todos juntos.