El inicio de la relación entre Ginés Corregüela y Yaiza Martín no escapó a la polémica y casi tan controvertida está siendo su ruptura. La canaria ha confirmado la noticia y ha explicado los motivos de la misma. No ha podido evitar derrumbarse al confesar que se ha sentido traicionada por su expareja.
"Ahí estoy, llevándolo. A nosotros no nos ha pillado desprevenidos. Esto ya viene de unos meses atrás", ha afirmado durante una llamada telefónica con el programa 'Fiesta'. La exconcursante de 'Supervivientes' ha recalcado que ella quien decidió que "ya no se puede seguir más".
"Los motivos no son los que se están contando", ha subrayado desde el primer momento. Ha querido desmentir que haya fastidiado una exclusiva. "No era el propósito por mi parte, quizás por la otra parte. No lo sé. Es una decisión que estaba tomada en mi casa y que iba a zanjarse de una forma bonita. Nos podríamos haber llevado bien", ha contado.
El motivo de la ruptura entre Yaiza Martín y Ginés Corregüela
La canaria ha reconocido que la ruptura ha sido ocasionada por una suma de circunstancias. "Las causas externas son insoportables, el pico y pala del entorno todos los días y él no impidiendo ciertas cosas. Todo ello va sumando. Fui yo quien lo quiso zanjar. Él está estirando esto toda la semana, pudiendo haber terminado con el tema desde el principio", ha manifestado.
En el momento en el que ha tenido que ahondar en la ruptura, se ha roto en lágrimas. "Me quiero callar porque yo estas declaraciones las estoy haciendo gratuitamente. Yo estoy hablando para aclarar que mi situación la puedo demostrar. Dicen a 'Yaiza se le acabó el dinero, se le acabó el amor', háganle la pregunta a él".
Yaiza ha contado que Ginés Corregüela le debe dinero y que ella siempre quiso arreglar el asunto en privado. "Es él quien está estirando el chicle. No voy a permitir que me siga chupando la sangre una garrapata. No lo voy a permitir", ha dicho.
Ha contado que tenían una cuenta en común de la que faltó dinero recientemente. "Eso ya está en manos del abogado. Es él quien tiene que dar la respuesta. Es su firma de puño y letra y sin pedirme autorización", ha indicado.
La canaria ha aclarado que ambos estaban viviendo en un piso de Sevilla, pero que de un día para otro Ginés le propuso una nueva vida. "Aquí no ha habido terceras personas, ni nadie que intoxique más de lo que ya estaba intoxicado. Aquí este señor me dijo un día que nos íbamos a vivir a Úbeda. Yo le dije que no me iba ni loca. No quería encontrarme a estas tres en el supermercado. Yo decidí quedarme en Sevilla. Él no lo acepta. Por eso termina mi relación. Los caminos se separan".
La llamada de Miriam Corregüela hace estallar a Yaiza
La hija de Ginés, Miriam Corregüela, también ha intervenido en 'Fiesta' a través de una llamada. Esta última semana hacía un sonado comentario: "A todo cerdo le llega su San Martín. Qué justa es la vida, hace justo un año se rieron de mi madre por ser la cornuda de España".
Cabe recordar que Yaiza y Ginés se convirtieron en la pareja estrella de 'Supervivientes 2023'. Incluso celebraron una sonada boda en los Cayos Cochinos de Honduras. Recientemente, daban un paso más en su relación y emprendían un negocio juntos. Un local de venta de bocadillos que abrió sus puertas hace unos meses en Sevilla y que lleva el nombre de 'Uno que empape'.
Yaiza explotaba contra la hija de su expareja. "A ella no le interesa un acercamiento con el padre porque se le caería el personaje televisivo que tiene metido dentro en la vena", le decía. Miriam Corregüela ha sido tajante durante su intervención. Ha aclarado desde el primer momento que no se siente responsable de la ruptura.
"Los que se tienen que sentir responsables son ellos. Lo hemos pasado muy mal por su culpa. Yo he perdido veinte kilos por su culpa. Ha sido un acoso y derribo por cada año que ha estado con él", ha subrayado.
La hija de Ginés ha vuelto a cargar duramente contra Yaiza. "Nadie aguanta a esta persona. Me ha acosado a mí y a mi madre. Tengo todas las pruebas. Esta situación se ha ido de las manos". La conversación terminaba de forma abrupta y entre gritos, Emma García se veía obligada a acabar la llamada, sin que ninguna de las dos diera su brazo a torcer.