La Navidad está a la vuelta de la esquina, y para Gabriela Guillén, se trata de una de las épocas más señaladas del año. Está a punto de cumplirse un año desde que la paraguaya dio a luz a su primer hijo con Bertín Osborne. Una buena nueva que, desde el primer momento, estuvo marcada por la polémica, pues el presentador se desvinculó de la joven rápidamente, e incluso después del nacimiento del pequeño, concedió una entrevista en la que confesaba no estar dispuesto a ejercer su rol como padre. Sin embargo, nada queda ya de esa negativa, pues a través de un comunicado, el cantante dio un paso atrás para revelar que trataría a su bebé del mismo modo que al resto de sus vástagos. Esto supuso un acercamiento con su ex en toda regla, que parece estar viviendo uno de los momentos más felices de su vida.
El retoque 'beauty' al que se ha sometido Gabriela Guillén en una etapa muy especial
Prueba de ello es su última publicación de Instagram. Gabriela Guillén ha querido ponerse a punto de cara a la Navidad, y para conseguirlo, se ha puesto en las manos de sus profesionales de confianza para hacerse “una hidratación profunda con productos totalmente orgánicos” que le ha aportado “brillo, vida y efecto espejo” a su cabello. A juzgar por el vídeo que ha compartido, todo apunta a que la joven ha quedado encantada con el resultado, que hace que su pelo se vea mucho más sano y natural.
Pero este no es el único retoque que se ha hecho en estos meses. En septiembre,la joven se sometía a una bichectomía, que consiste en eliminar las bolas de Bichat del rostro para afinarle y darle forma, mientras se resaltan los pómulos y se marcan las facciones. De hecho, la prensa fue quien pillo a la paraguaya justo a la salida de la clínica: “Estoy hinchada, no puedo ni hablar, tengo la anestesia, me habéis pillado ahora mismo al salir que estoy hasta mareada”, decía, con cierto toque humorístico.
Sus palabras no quedaron ahí, y siguió revelando los motivos que le habían llevado a recurrir al bisturí por primera vez: “Era una cosa que tenía ahí pendiente porque tengo la cara muy fina, hay muchas fotos que me veo la cara muy plana, tenía ese complejo y nada, me he animado a hacerlo por fin. No soy de hacerme nada, no llevo bótox, no llevo absolutamente nada. Nunca me he hecho nada, estoy conforme como estoy. Ahora, mira, me he animado a esto. Cuando se entere mi madre me va a matar”, confesaba entre risas.
No obstante, todo apunta a que, a partir de ahora, la ex de Bertín Osborne se hará algunos de estos tratamientos de belleza en el centro que ella misma ha abierto con una socia en el barrio de Salamanca, en pleno corazón de Madrid: “Estamos abriendo un centro de estética, os enteraréis todos dentro de nada. Estoy trabajando mucho en ello. Más a nivel interno. Pero sí, estoy muy contenta y también estresada porque son muchas cosas. Una empresa lleva muchas cosas”, revelaba, y ahora ha podido saberse que, por suerte, este negocio marcha a las mil maravillas.
El giro de 180 grados en la actitud de la ex de Bertín Osborne
Si algo está claro, es que en las últimas semanas Gabriela ha optado por cultivar su imagen como nunca antes. Aunque parecía que la joven no iba a querer formar parte del ámbito mediático cuando se dio a conocer su romance con Bertín Osborne, el tiempo le ha hecho pensar lo contrario. Tanto es así, que ahora ha pasado a formar parte incluso de photocalls de distintos eventos, en los que no solo posa ante las cámaras, sino que también saca a relucir su lado más personal.
En una de sus últimas apariciones públicas, Gabriela dejó entrever que estaba dispuesta a tender puentes con Bertín Osborne por el bienestar de su pequeño en Navidad. Esta época del año es una de las más familiares por excelencia, y la paraguaya no está dispuesta a que, en el caso de su hijo, se viva de una forma distinta: “Si él quiere, podrá estar (con su hijo). Siempre ha tenido las puertas abiertas. Nunca pongo impedimentos”, aseguraba. Además, es consciente de que la presión mediática puede ejercer de una manera negativa en la actitud de su ex, por lo que prefiere que sea él quien tome la decisión que considere: “Los adultos hacemos nuestras vidas (…) En la vida es todo posible, todo es mágico”, indicaba, haciendo referencia a la posibilidad que existe de que pasen algún día de la Navidad juntos con su hijo, algo que, hasta ahora, no ha sucedido.