El hecho de que Rocío Flores haya sido durante meses uno de los personajes más de actualidad ha alterado mucho la vida de la joven. Ha conseguido muchos beneficios, pero no todo ha sido positivo. Y es que su presencia en televisión coincidió con la emisión del desgarrador testimonio de su madre, Rocío Carrasco, que por supuesto, salpicó a la joven de una manera arrolladora.
Tras cumplir su labor como defensora de Olga Moreno en 'Supervivientes', Rocío Flores se retiraba de la televisión un tiempo para recuperarse mentalmente. Pero los problemas no acabaron. Ella misma ha desvelado en 'El programa de Ana Rosa', donde sigue colaborando, que le han usurpado su identidad.
Tal y como ha informado el programa en el que trabaja, un hombre ha pasado a disposición judicial en el Juzgado número 8 de Málaga por un presunto delito de acoso cibernético y por suplantación de identidad a raíz de una denuncia que Rocío Flores y su padre, Antonio David Flores, pusieron contra esa persona.
Han usurpado la identidad de Rocío Flores y ella lo ha denunciado
El denunciado se presentaba supuestamente como un expretendiente de 'Mujeres y Hombres y Viceversa' y expareja de Sofía Suescun para tratar con información que él mismo se inventaba sobre otros rostros conocidos. Muchos periodistas dieron por ciertas informaciones. Rocío Flores y Antonio David Flores lo pillaron y no dudaron en demandarlo.
"En mi caso se hacía pasar por mí y por mi padre a través de algunas redes sociales y emails como si fuéramos nosotros. Vendía información sobre nosotros y terceras personas. Recreaba mi perfil para crear pruebas", ha explicado Rocío Flores sobre el problema que se han encontrado recientemente ella y su padre y que por supuesto, han puesto en manos de la Justicia.
Ya ha denunciado insultos y amenazas en las redes sociales
No es la primera vez que utiliza su influencia para denunciar episodios desagradables a través de sus redes sociales. A través de las redes sociales, la hija de Rocío Carrasco compartía varias capturas de pantalla de su teléfono móvil en las que se podía leer los mensajes intimidatorios que recibió en Instagram. En ellos se recogen los insultos de una usuaria de las plataformas digitales. «Foca», «morsa» o «subnormal», son algunas de las palabras que le dedican.
En otra de sus amenazantes advertencias, la hater de la joven respondía a una foto suya en la ducha: «Cuidado no te resbales sin querer». Unos comentarios a los que la colaboradora respondía serena e, incluso, con sentido del humor. «La pobre debe de estar demasiado aburrida. eso sí, a ella le encanta que la ponga aquí. Se siente orgullosa. Qué lástima ver gente así. Pero lo mejor de todo es que me sigue», señalaba. Asimismo, se lamentaba de que haya gente que esté tan «mal de la cabeza».