Alto y claro, así ha hablado Rocío Carrasco en el plató del 'Especial Deluxe' con motivo de la emisión de los dos primeros capítulos de la segunda entrega de su docu-serie, 'En el nombre de Rocío'. La protagonista ha reconocido que su historia familiar es "complicada", también que no se pronuncia desde el odio o la venganza sino que ha llegado su momento de defenderse. Durante esta última intervención nos deja demoledoras declaraciones contra los miembros más mediáticos de la familia Mohedano.
Rocío Carrasco ha negado que el clan haya sido generoso con la siempre recordada Rocío Jurado. "Yo considero que cuando una persona es generosa con otra lo es a cambio de nada. Esa es la generosidad. A mí no me parece que tenga valor que estuvieran con ella en Houston porque no se podía dar otro escenario. Tenían que mantener una fachada", ha subrayado. "No quiero decir que no la quisieran, pero podrían haberla querido mucho mejor. No son generosos porque no era una acción desinteresada".
Rocío Carrasco, rotunda: "Son una jauría"
Además, ha querido hacer hincapié en que no considera que ha insultado a la familia al llamarles "jauría". "Estoy describiéndoles. Son una jauría que van a la presa más fácil, a la presa más indefensa, a la presa que está herida y saben que pueden atacar. A la presa que está arriba y era quien les ponía el límite. Estoy describiendo un comportamiento. No les estoy insultando. Ellos no pueden ir en contra de ella, por tanto van en contra de la persona a la que ella más quería", ha manifestado.
“Si fueran ángeles, normales, maravillosos, no los llamaría así. Van en contra de la persona que más quería en el mundo”, ha afirmado la protagonista de la docu-serie desde el plató de Mediaset. También ha querido dejar claro a la audiencia que estaba acercando esta versión de los hechos porque tiene esa necesidad de contarlo en este momento. Después de años de haber "escuchando tantísimas barbaridades, cosas que no son, ataques... Al final yo tengo mi derecho a defenderme. Tengo mi derecho a réplica. No puedo seguir más tiempo escuchando barbaridades".
Ha insistido en que su testimonio no se debe al despecho. "Estoy escuchando algunas opiniones de que yo actúo bajo el prisma del odio o la venganza. Para nada. Eso no es así". Rocío Carrasco ha indicado que su profundo silencio se debió a que ella en ese momento no estaba bien y no disponía de las fuerzas necesarias para contestar. Pero eso ha cambiado por completo. "Yo la rabia y la fuerza que tengo ahora, la experimento ahora. Lo que hacía antes era agachar la cabeza y llorar. No entendía nada porque es sangre de mi sangre. Yo he vivido una mentira en mi vida".