José María Almoguera se ha convertido en el fichaje estrella de la tercera edición de 'GH DÚO'. El hijo de Carmen Borrego está llamando la atención de sus compañeros dentro de la casa de Guadalix. Y también de los espectadores, que se preguntan el motivo por el que el joven no puede hacer las pruebas del reality de Telecinco. ¿El motivo? La enfermedad cardiovascular que sufre y que también padece Carla Barber.
En los últimos meses, los rumores sobre una posible participación de José María Almoguera en 'Supervivientes' obligaban a Carmen Borrego a explicar que su hijo tiene un problema en su corazón. Una enfermedad que le impide hacer determinados esfuerzos físicos. Se trata del síndrome de Brugada, una afección genética que afecta al ritmo del corazón y puede aumentar el riesgo de sufrir arritmias graves. Es una causa importante de muertes súbitas en personas jóvenes y aparentemente saludables.
El síndrome ocurre debido a problemas en los canales de sodio del corazón, que son esenciales para que este órgano bombee sangre de manera adecuada. Estos canales ayudan a las células cardíacas a generar impulsos eléctricos que controlan los latidos del corazón. Cuando no funcionan bien, pueden producir arritmias.
Uno de los aspectos más preocupantes del síndrome de Brugada es que muchas personas no presentan síntomas evidentes hasta que ocurre algo grave. Entre los signos de alerta se pueden incluir desmayos, palpitaciones o episodios de respiración entrecortada, especialmente durante el sueño. El diagnóstico puede complicarse porque estos síntomas pueden confundirse con otros problemas menos graves.
En la primera prueba de 'GH DÚO 3', José María Almoguera explicó que no podía realizarla porque se le podía soltar un cable de su desfibrilador. Según explica 'Medicine Plus', en personas con alto riesgo de arritmias peligrosas, el tratamiento pasa por la implantación de un desfibrilador automático (DAI). Este dispositivo detecta ritmos cardíacos peligrosos y administra una descarga eléctrica para restaurar el ritmo normal. Como es el caso del hijo de Carmen Borrego.
Se trata de un síndrome que no tiene cura, pero el diagnóstico temprano puede reducir significativamente el riesgo de una muerte súbita. Los que sufren esta afección genética pueden llevar una vida normal y saludable. No obstante, existen ciertas contraindicaciones que deben tenerse en cuenta y que explican el motivo por el que José María Almoguera no puede hacer determinadas pruebas dentro de la casa de Guadalix. En estas se incluyen el uso de medicamentos específicos, actividades que desencadenen estrés cardíaco y condiciones que alteren el funcionamiento normal del corazón.
Carmen Borrego reveló que a su hijo le diagnosticaron la enfermedad cuando tenía 23 años, cuando tuvo que ser intervenido del corazón. También dejó claro que las pruebas del reality que supongan posibles caídas o una fuerte actividad física no podría realizarlas. "Un mal golpe en el desfibrilador y se podría soltar algún cable", contaba la hermana de Terelu Campos.
Así habló Carla Barber del síndrome de Brugada
Como decíamos, el síndrome de Brugada es una enfermedad que no solo sufre José María Almoguera, también Carla Barber. La médico estética reveló hace unos años que le habían diagnosticado este síndrome muy tarde y cambió drásticamente su vida para no sufrir una muerte súbita.
"Hace justo un mes que me dieron la noticia de que tenía una enfermedad del corazón. No os había dicho nada todavía porque estaba esperando a tomar una decisión sobre qué hacer. Tengo una enfermedad que se llama síndrome de Brugada, es una canalopatía que da lugar a arritmias y que produce muerte súbita", contaba hace tres años.
Cuando anunció su diagnóstico, hizo hincapié en que estaba en shock todavía porque no tiene cura. "Es una enfermedad que no tiene tratamiento, no tiene cura, ni tampoco pastillas que se puedan tomar. Lo único que puedo hacer es poner un desfibrilador que impide que en el caso que te de la muerte súbita, te mueras”, explicaba.
En un problema en el corazón que no se debe a un alto ritmo de trabajo ni al estrés que puede sufrir en su día a día. No sabía entonces si era algo genético puesto que un familiar suyo murió de muerte súbita. Aunque esta enfermedad coronaria podría costarle la vida, ella se mostró positiva. Los médicos dieron con este diagnóstico después de que fuera ingresada durante unos días y fuese sometida a varias pruebas.