Cauta, prudente y sin perder la sonrisa, este martes Paula Echevarría reaparecía ante los medios de comunicación tras un verano muy especial. Se trataba del primero que disfrutaba en calidad de mujer divorciada y al lado de su nueva pareja, el futbolista Miguel Torres. Con su relación ya estabilizada y una vez superada la expectación de ver a Paula de nuevo enamorada, la actualidad rosa de las últimas semanas ha estado marcada por el supuesto conflicto que a día de hoy enfrenta a los que un día fueron uña y carne: Bustamante, ex de Paula, y Poty Castillo, uno de los mejores amigos de la asturiana.
Paula no quiere participar en la polémica
Aunque al principio ella ha tratado de echar balones fuera en este asunto, al final no ha podido evitar pronunciarse y dejar clara una cuestión, que es que, por su parte, la relación con el coreógrafo es estupenda hasta el punto de que esa misma tarde, la de este martes, su hija Daniella se ha quedado a su cuidado mientras ella atendía sus compromisos como imagen de Samsung. Pero, ¿qué tiene que decir sobre el tenso momento que viven ahora su amigo y su ex?
Una cuestión delicada
Aunque el coreógrafo ya se ha apresurado a asegurar que él no tiene ningún problema con el cantante, lo cierto es que este dejó de seguirle en las redes sociales. Una ruptura 2.0 que vino motivada cuando, esta primavera, según ha desvelado Aurelio Manzano, Paula quiso hacer una reunión en Málaga con Poty y con su chico, Miguel. Una cita que el miembro del jurado de 'Pura Magia' quiso comunicar al cántabro provocando la ira de este y aguando la reunión. ¿Qué opina Paula al respecto de este comportamiento por parte de su ex? Preguntada por la prensa, ella hizo una mueca de querer guardar silencio, pero instantes después dijo: "Ya somos todos muy mayores para tener que elegir amigos. Yo creo que todos podemos ser amigos, no hay por qué elegir". El recado ahí queda.
"No he tenido una separación traumática"
A pesar de todo, Paula mantiene que su relación con David es buena. "Mi relación con David es estupenda. Estupenda no es que quedamos todos los días para tomar un café y cenamos los sábados. Es una relación como tiene que ser. Hablamos las cosas que tenemos que hablar, nos ponemos de acuerdo en las cosas que nos tenemos que poner. Siempre vamos a ser familia. Lo más importante en la vida de los dos es nuestra hija y por ella y para ella siempre vamos a intentar ponernos de acuerdo a la primera en todo. Los dos vamos a una. No tiene por qué ser de otra manera. No ha sido una separación traumática", explicó.
Su casa nueva
Y es que en pocos meses, la otrora pareja tendrá que volver a reunirse para llegar a un acuerdo sobre la venta de la que fue su hogar familiar. Actualmente, Paula y su hija viven allí hasta que terminen las obras de su nueva casa, pero una vez finalizada la construcción, que se estima que sea a principios del año 2019, ella y David tendrán que venderla y para ello será necesario acordar un precio de venta.
David ya es pasado
Pero Paula tiene muy claro que David ya es pasado. Su presente es Miguel Torres, de quien prefiere no hablar demasiado, pero con el que reconoce haber logrado la estabilidad y la tranquilidad. "Ahora disfruto más de la relación, pero no porque la prensa ya no nos siga tanto, sino porque con el tiempo disfrutas más las cosas. Todo es mejor cuando se estabiliza, se asienta y se tranquiliza en todos los sentidos. Yo siempre he dicho que el tiempo lo pone todo en su sitio", explica la actriz. Además, asegura que siempre lo ha tenido muy claro con Miguel Torres y que nunca ha dudado del futuro de su noviazgo. "Yo tengo las ideas muy claras. No me dejo influenciar nunca por cosas que vengan de fuera. Yo vivo lo que yo vivo y siempre he sido así. En su día con David también fui así. Yo juzgo lo que yo veo, no lo que me cuenten", sentencia.
Relación a distancia
De momento, ella y el jugador tendrán que proseguir con su romance a cientos de kilómetros. Él continúa formando parte de la plantilla del Málaga y Paula vive en Madrid. Una distancia que no supone ningún problema: "En este momento de mi vida quizá sea lo mejor para dar tiempo a que todo se ponga en su sitio. Es una manera de que todo vaya fluyendo de una manera normal y tranquila y no tener presión".