"I’ll be here for anything" ("estaré aquí para cualquier cosa"), escribe Tamara Falcó en su última publicación de Instagram, donde acumula más de un millón y medio de seguidores, entre los que hay absolutos admiradores de la marquesa y se cuela algún que otro 'hater'. Sin embargo, hasta algunos de sus admiradores han sacado su lado más crítico ante su última foto, y es que hay un detalle que no han terminado de entender. Y tiene que ver con el estilismo que ha escogido.
En la instantánea, Tamara posa sentada sobre el banco de piedra de su impresionante terraza, un auténtico oasis de paz en Madrid, al borde de la piscina, y lo hace luciendo un vestidazo túnica que no ha pasado desapercibido. ¿El motivo? Es de manga larga. Y sus seguidores no han tardado en alucinar. "Bien tapadita para el fresco que hace en Madrid", le escribe un seguidor, "Pero criatura, ¿por qué vas vestida así en verano?", le añade otra, "¡¿y no morirás de calor chiquilla?!", añaden, "muy cómodo ese vestuario con 40 grados a la sombra…". Sin duda, multitud de comentarios de seguidores de la ganadora de Masterchef que no entienden su elección para estos días tan calurosos, y es que aseguran que "da calor solo verla".
Sin embargo, lo cierto es que el vestido es de lino, un tejido que garantiza "ligereza y comodidad", tal y como señalan desde la propia firma, Maksu, donde puedes encontrar este vestido túnica rebajado, por 138 euros. Se trata de un diseño de inspiración étnica, confeccionado artesanalmente en lino 100%.
"Esta prenda midi en color blanco crudo, que se puede llevar como vestido, presenta mangas ligeramente abullonadas, puños elásticos, un favorecedor escote redondo y un cinturón con dibujos geométricos en tonos naranjas. Como contraste, presenta detalles bordados en negro. En primavera y verano, puedes llevarla como caftán", señalan desde Maksu.
Pero su 'look' no ha sido lo único que se ha convertido en el centro de la polémica, también hay quien ha señalado que su posado es puro 'postureo' y se preguntan si realmente ha utilizado, alguna vez, su piscina. "Además, con esa piscina ahí, seguro que la has usado o ¿está de adorno? Quien pudiera tener algo así para disfrutar", le escribe una seguidora.
Oasis en una de las zonas más exclusivas de Madrid
Gracias a su actividad en redes sociales, Tamara Falcó, nos ha permitido 'colarnos' en su jardín. Poco a poco, la hija de Isabel Preysler nos va abriendo las puertas de su ático en Puerta de Hierro, en una de las zonas más exclusivas de Madrid.
Decorada con un gusto exquisito, uno de los grandes hitos de este ático es la piscina privada. Su terraza cuenta con unos 187 metros cuadrados y unas impresionantes vistas a los parques forestales de la Dehesa de la Villa, la Casa de Campo y el Monte de El Pardo.
Está diferenciada por varias zonas. Además de una zona chill out con un cenador, perfecta para disfrutar de las noches de verano cuando su agenda se lo permite, también tiene dispuestas dos cómodas tumbonas para tomar el sol, relajarse o para leer un libro. Cada una de las tumbonas tiene un valor de más de 3.000 euros, ya que son de alto diseño, con estructura en perfil de aluminio y elegante malla de deployé de la marca Vondom.
Para protegerse del sol, la pareja se decantó por una sombrilla con estampado de triángulos en beige, marrón y negro, cuyo precio estaría rondando los 200 euros. También encontramos una mesa auxiliar de gres blanco, cuyo valor sería el de unos 180 euros aproximadamente.
Todo un lujo al alcance de unos pocos. Pero que no cunda el pánico, desde SEMANA hemos decidido darte unas cuantas pistas para que puedas recrearla con precios muy asequibles y disfrutes este verano como si fueras una marquesa.
Una casa de ensueño que comparte junto a Iñigo Onieva
Aunque ahora Iñigo está en París totalmente alejado del calor madrileño, y de paso, de las críticas, el matrimonio comparte este precioso ático diseñado y decorado al detalle.
Se trata de una vivienda de 190 m2 con terraza y piscina privada en la que reina un estilo clásico de lujo gracias a los elementos decorativos y a un detalle que no pasa desapercibido: los rodapiés de piedra, de gran tamaño, que visten toda su casa. En las imágenes que ella misma comparte se observa, a la perfección, como combina los tintes clásicos con detalles contemporáneos, tanto en la decoración como en el revestimiento de sus paredes y techos.