Mila Ximénez ha querido demostrar que sí está luchando contra un cáncer, mostrando las marcas que la quimioterapia ha dejado en su cuerpo, tras someterse a una nueva sesión de su tratamiento. Así trata de acallar las críticas y especulaciones

Mila Ximénez se ha visto cuestionada en las últimas semanas por aquellos que critican su presencia en televisión. El hecho de verla bien físicamente ha dado pie a muchas personas a poner en duda que ciertamente esté luchando contra un cáncer inoperable de pulmón. Unas dudas que han causado un gran dolor en la colaboradora de ‘Sálvame’, que no entiende muy bien por qué debe dar explicaciones sobre la dura enfermedad por la que está viviendo. Pese a ello, no tiene reparos en hacerlo si con eso logra frenar las dolorosas especulaciones que minan su autoestima, como así ha hecho al mostrar las pruebas de las secuelas que el tratamiento contra el cáncer ha dejado en su cuerpo, al cruzarse con los reporteros de ‘Europa Press’.

 Para ello, Mila Ximénez ha mostrado las marcas que las vías que le han puesto en el hospital le han dejado en su brazo. La periodista ha acudido al centro de salud a recibir una nueva sesión de quimioterapia y ha hablado sin problemas sobre cómo son estas duras sesiones y cómo le afectan en su estado de ánimo, más allá de las secuelas físicas con las que debe lidiar durante varios días después de someterse al tratamiento.

Por fortuna, Mila Ximénez no se siente sola en esta batalla y cuenta en todo momento con la inestimable ayuda de su hija Alba. La hija de la periodista no solo está ahí siempre que su madre necesita un hombro sobre el que llorar sus penas y verbalizar sus preocupaciones, sino que también coge un avión para estar una semana al mes a su lado: “Me da la vida”, confiesa Mila Ximénez, a sabiendas del tesoro que tiene al contar con la estrecha relación que mantiene con su hija, más presente que nunca ahora que realmente la necesita a su lado. Vea el vídeo.