María Pombo lo tiene claro: va a volver a casarse. Para (no) tan sorpresa de sus seguidores (y es que ya confesó sus deseos hace un tiempo), sigue adelante con sus planes de volver a casarse. Eso sí, sus planes son volver a hacerlo con su mismo marido, Pablo Castellano. Que no cunda el pánico. La 'influencer' por excelencia ha desvelado que quiere celebrar una 'reboda' dentro de cinco años, es decir, en su décimo aniversario de aquella primera e idílica boda con el empresario y padre de sus dos hijos, Martín y Vega. 

Así lo desvelaba poco después de su primer 'sí, quiero': "Yo le he dicho a Pablo que a los diez años de matrimonio nos volvemos a casar" y esta vez, a diferencia de la primera, "nos acompañarán Martín y Vega". Bueno, quién sabe si alguno más... "Si viene algún hijo más también", aseguraba sin descartar la opción de tener más hijos y convertirse en familia numerosa.

Ahora, tras volver a convertirse en invitada al acudir a la boda de una de sus grandes amigas en el mundo de la red, Bea Gimeno, que dio el 'sí, quiero' a Nacho Aragón este fin de semana, la joven ha confesado que sus deseos de volver a casarse siguen intactos. "Cada vez que voy a una boda hablo de cómo va a ser nuestra reboda en 5 años 😂🤍👰🏽‍♀️", escribe junto a un vídeo en el que aparece 'convenciendo' a Pablo de volver a casarse: "Cuando le dices por 1264850 vez que te quieres volver a casar", puede leerse en las imágenes en las que, sacando su lado más divertido, bromean con la situación.

Para añadirle un toque más divertido, si cabe, se escucha de fondo la famosa canción de C. Tangana 'Nunca estoy' en la que el madrileño comienza diciendo: "¿Vamos a repetir esta conversación 35 veces? 35 veces vamos a hablar de la misma mierda". Unas palabras que Pablo simula decir con su boca mientras María baila emocionada por sus planes de boda.

 

Una boda de ensueño

El 22 de junio de 2019, María Pombo y Pablo Castellano celebraron una idílica boda en la Colegiata de Santa Cruz de Cantabria junto a 300 invitados entre los que no faltaron rostros conocidos. 

Para la ocasión, María rompió estándares con un vestidazo sirena de Yolancris en crepe acompañado de un abrigo largo. El vestido era una pieza minimal con escote halter con aberturas en espalda y costados. El abrigo, la pieza clave y que más destacaba de su atrevido 'look', estaba confeccionado en tul bordado en pedrería y a bastidor en tonos blanco y crudo, con toques de color rosa quarzo y oro. Las mangas acampanadas están acabadas en pico y con botones de cristal, tal y como apuntan desde la firma.

Pero su enlace dio mucho de qué hablar más allá de los 'looks', y es que María y Pablo protagonizaron un momento 'polémico' cuando en el altar sonó el himno de España. Pero de aquello ya ha llovido y ahora la pareja está deseando volver a casarse (y estamos seguros de que por todo lo alto).

Juntos han hecho frente a diversas polémicas, entre ellas una fuerte crisis en su matrimonio que la propia María confirmó.

Su crisis matrimonial, un secreto a voces

Ocurría mediante unas imágenes publicadas por las propias Pombo en redes sociales, donde la influencer y sus hermanas hacían un ritual de luna llena en el que escriben en varios papeles una lista de deseos y agradecimientos. En el papel de María podía leerse: "Mi matrimonio, que estaba en la cuerda floja, está mejor que nunca. Más enamorados y felices que nunca. Muchas gracias".

Pero ese bache pasó y ahora María y Pablo atraviesan uno de los momentos más felices de su vida, sobre todo ahora que han pasado su primer verano en 'Casa Vaca', su impresionante casa en Cantabria que se han hecho a gusto y medida y en la que ya han pasado grandes momentos para el recuerdo (y otros para el olvido, como su fuerte caída con la pequeña Vega en brazos, que, por suerte, se quedó en un susto).

Juntos han formado una preciosa familia de 4 a la que se suman sus hermanas, Lucía y Marta, sus padres, Papín y Teresa Ribó, y sus sobrinas, Matilda, hija mayor de su hermana Marta, y las mellizas María y Candela, que acaban de llegar al mundo para multiplicar la felicidad en la casa Pombo.