La reina Máxima se quita los volantes para ir a Etiopía

La Reina de los Países Bajos ha retomado sus compromisos oficiales tras pasar un fin de semana muy movido con su familia en Sevilla. Su visita a la ciudad hispalense, con su presencia en la Feria vestida de flamenca junto a sus tres hijas, ha dejado paso a una cita mucho menos festiva. El trabajo es así.

En la capital del país africano

Máxima aterrizó ayer en Etiopía para emprender un viaje de tres días centrado en el acceso a los servicios financieros para los ciudadanos de a pie. La soberana acude en calidad de Embajadora Especial de la Secretaría General de las Naciones Unidas para el Desarrollo de las Finanzas Inclusivas.

• Máxima de Holanda, 'cazada' bailando rumbas en Sevilla.


• La Familia Real holandesa, de fiesta en el consulado italiano de Sevilla. 


• Las hijas de Máxima se hacen mayores y le roban el foco.

Un look moderno y profesional

Máxima comenzó sus actividades en la capital, Adís Abeba, para lo cual lució un vestido caqui con un original detalle delantero acordonado y cinturón ancho de rafia, junto a unas sandalias de pulsera con tacón cuadrado.

Un gran bolso para sus documentos

El bolso tipo shopping bag, es decir, de tamaño grande, le servía para guardar los documentos e informes que necesitaba para la jornada y que se inició con una reunión en una oficina de la ONU, a la que asistió el Ministro de Economía del país africano.

El toque Máxima: sus grandes pendientes

En cuanto a adornos Máxima llevaba un par de pulseras de brillantes, un detalle típico de ella, que no le importa ponerse grandes piezas con un estilismo menor. Los pendientes de esta ocasión no podían ser más "Máxima Style": grandes, con lenguetas bicolor. A priori no pegan demasiado, pero solo ella puede defenderlo.

Ilustres visitantes de la Feria de Abril

Como vemos, Máxima estaba en un tono radicalmente distinto, y es que una cosa es el placer y otra el trabajo. El pasado jueves los Reyes de Holanda y sus hijas llegaba a Sevilla para ir a la popular Feria de Abril, donde la pareja se conoció justo hace 20 años. Esta vez quisieron que sus niñas, Amalia, Alexia y Ariane, pisaran los orígenes de su amor. Si encima podían disfrutar de la fiesta vestidas de flamenca, con sus bonitos trajes de volantes, sus mantoncillos y sus flores en el pelo, mejor que mejor. Tras un fin de semana intensísimo, con bailes, cenas y demás, el pasado domingo regresaban a casa con la alegría en el cuerpo.

Cumpliendo con el deber

Sin solución de continuidad, el mismo lunes retomaba sus obligaciones en solitario. La Reina suele viajar muchísimo en defensa de estas iniciativas financieras y es embajadora desde 2009.

Tres días de viaje

Mañana miércoles finalizará este viaje y entonces podrá volver a Holanda con su familia. Máxima sabe divertirse (en Sevilla lo ha demostrado con creces), pero también cumple con sus responsabilidades al más alto nivel.