Daniel Sancho se preocupó de mandar mensajes a amigos y familia antes de entrar en prisión. Reconoció los hechos, se despidió de su novia y pidió que cada uno de ellos siguiera con su vida. Eso sí, hizo una firme petición antes de dormir entre barrotes. Perfectamente consciente de cuál podría ser su futuro si fuera condenado por el crimen de Edwin Arrieta, quiso pedir dirigirse a aquellos que jamás le habían fallado. Por la amistad y por todos los momentos que había vivido con ellos a lo largo de su vida, un mensaje que un íntimo de Daniel ha destapado. "Siempre ha sido una persona fiel a sus amigos, con muchos principios. No le veo haciendo algo así, es todo bondad", comienza diciendo esta persona que no ha querido revelar su identidad. Un perfil que en un principio no tendría, a sus ojos, nada que ver con el de un asesino.
El mensaje íntegro de Daniel Sancho
"Por favor no me olvidéis", repetía Daniel Sancho tras reconocer que había asesinado y descuartizado a este cirujano colombiano. En un escueto texto pedía perdón a sus seres queridos, a quienes dejaría de ver si finalmente es condenado en Tailandia. "Nos dijo que lo sentía mucho, no poder compartir los momentos que iban a entrar en nuestra vida ahora, que por favor no lo olvidáramos", asegura una persona muy cercana al chef, quien ahora se encuentra en prisión. Todavía están impactados y en shock, pues jamás imaginaron que Daniel podría acabar con la vida de alguien. De hecho, llegaron a plantearse que nada de lo que se había dicho fuera cierto. "Siempre puedes pensar que puede ser una subida de tono de una noticia, pero el padre contactó con nosotros", explica esta fuente a 'Ya es mediodía'. De este modo, el propio Rodolfo Sancho reconoció que Daniel podría estar implicado en un grave caso investigado por la policía, algo que ha sucedido a miles de kilómetros de España, lo que hace que la situación sea todavía más difícil.Aunque Rodolfo Sancho se ha apresurado a decir que "está firme y tranquilo", el que le conoce sabe la crudeza que acompaña al actor desde que saltara el escándalo. Padre e hijo tenían una excelente relación, lo que hace que su detención sea todavía más complicada. "Era el niño de sus ojos, el de su abuela y los tíos tres cuartos de lo mismo", deslizan. Este testimonio transmite también el miedo que se ha apoderado de todo aquel que tenía cariño a Daniel, pues saben lo bien relacionado que estaba Edwin en su país, así como las amistades que le había proporcionado su profesión como cirujano plástico. "Si esa persona tenía fama en Colombia en la cárcel Daniel puede tener problemas", apuntan.
La familia de Edwin no ha dejado de llorar su muerte desde que se confirmara que Edwin había fallecido. Habría sido descuartizado en 15 partes, restos de los que se han encontrado parte tanto en el mar como en vertederos de Tailandia.