Se han cumplido más de 100 años desde el nacimiento de Lola Flores, y su recuerdo sigue vivo en su familia y en el mundo de la cultura española. Hace pocos meses se inauguraba un museo con su nombre en Jerez de la Frontera. 28 años después de su muerte, la folclórica sigue más presente que nunca en nuestros días y su descendencia tiene mucho que ver con ello. El legado de la Faraona sigue a día de hoy presente en sus cinco nietos: Alba Flores, Elena Furiase, Lola Orellana, Pedro Antonio Lazaga y Guillermo Furiase.
Quizás la menos conocida es Lola Orellana, que ha optado por tener una vida alejada de los focos. Llegó al mundo un año y medio después de la muerte de su abuela, y heredó su nombre. Su nacimiento supuso una gran alegría para su madre, Rosario Flores, sumida entonces en un pozo de tristeza tras la muerte de su madre y su hermano. La joven es fruto de la relación de la cantante y el bailarín argentino Carlos Orellana y vive alejada del foco mediático por decisión propia.
Rosario Flores ha afirmado en más de una ocasión que se siente satisfecha de haber podido ofrecer a sus hijos una vida lejos del conocimiento público. "Si de algo estoy orgullosa es porque a mis hijos no los conoce nadie. Ser famosa te marca. Y para mí sería muy egoísta hacerles a ellos famosos. Mi hija, por ejemplo, ahora está trabajando en cine. Puede trabajar de lo que quiera porque no la conoce nadie. Yo no he sido libre nunca", decía la hija menor de la Faraona hace tiempo.
¿A qué se dedica Lola Orellana?
Lola Orellana se dedica al mundo de la interpretación y desde bien joven se marchó a estudiar fuera de España para formarse. En concreto, lo hizo en Londres y aprovechó para mejorar su nivel de inglés, algo que le ha valido para conseguir grandes puestos de trabajo, y se especializó en fotografía.
Al contrario que sus primas, Alba Flores y Elena Furiase, a la hija de Rosario Flores le encanta estar detrás de las cámaras. La joven ha trabajado como asistente de casting de 'Dime quién soy', serie de Movistar+ protagonizada por Irene Escolar. Aunque su mayor oportunidad laboral llegaba hace unos años cuando ejerció de ayudante de dirección en 'Juego de Tronos', la mayor serie de todos los tiempos.
Echando un vistazo por sus redes sociales, podemos ver que también siente una gran pasión por el arte y no duda en compartir los dibujos que hace. Esto también ha provocado que inspire su propia línea de camisetas. Se caracteriza por sus obras reivindicativas y con un estilo propio.
La fuerte unión entre los nietos de Lola Flores
A pesar de vivir durante un tiempo en Reino Unido, Lola Orellana tiene una relación muy cercana con el resto del clan Flores, especialmente con sus primos. Con Alba Flores, hija de Antonio Flores y destinataria de la conocidísima canción 'Alba', y con Guillermo y Elena Furiase, hijos de Lolita, mantiene un contacto estrecho que se hace evidente en cada reunión familiar. De hecho, Lola es la madrina de la segunda hija de su prima Elena.
También mantiene una especial amistad con las dos hijas de Antonio Carmona y Mariola, con quienes ha crecido e incluso ha desarrollado proyectos artísticos.
Formó un grupo de música cuando era pequeña
Aunque lo suyo es el arte escénico, lo cierto es que cuando era más pequeña, con siete años, formó un grupo de música junto a su gran amiga Lucía Fernanda, hija de Antonio Carmona y Mariola Orellana. A este le llamó India Gitana y es el nombre que ha adoptado en sus redes sociales. Además, es una enamorada de los animales. De su vida privada poco o nada se conoce, tan solo ha salido a la luz que tiene una relación con el cantante de Naked Family, Antonio García Iguaz.
Su hermano pequeño, el desconocido Pedro Antonio Lazaga
El otro hijo de Rosario Flores, Pedro Antonio Lagaza, cumplía hace poco más de un mes 18 años, el mismo día que su abuela, la Faraona, cumpliría 101 años. Igual de desconocido que su hermana, Lola Orellana, los medios empezaban a publicar las primeras imágenes con su cara sin pixelar y mostraban a un atractivo joven que despertaba todo tipo de comentarios en las redes.