Laura Boyer rescató con su entrevista a SEMANA un asunto que parecía zanjado. No es otro que el de la herencia de Miguel Boyer, fallecido en 2014, de la que quiso hablar en una entrevista exclusiva que concedió apenas dos semanas antes de fallecer. Entre otras muchas cosas, hablaba de su renuncia al legado de su padre -se refería a un busto de piedra y varias deudas- y de su fría relación con Isabel Preysler a la que acusaba, entre otras cosas, de no cuidar a su padre. Sus palabras, las de Laura, han puesto de manifiesto lo que era un secreto a voces, que Preysler nunca se llevó bien con Laura Boyer, pero además han levantado una serie de dudas sobre cómo tuvo lugar realmente aquel reparto de la herencia de uno de los hombres más poderosos de España, de un Ministro de Economía, de don Miguel Boyer.Ahora, con la versión de la primogénita del político aún en boca de todos, es la abogada encargada del reparto quien alza la voz con SEMANA. "Isabel Preysler se llevó lo que ponía en el testamento. La voluntad del señor Boyer se cumplió a rajatabla. Ella no decidió nada porque todo estaba por escrito", nos dice Purificación Pujol, abogada encargada del reparto de patrimonio de Miguel Boyer. Ella e Isabel se conocen desde el año 1997, son grandes amigas y han estado presentes en la vida de la otra tanto en lo bueno como en lo malo y por eso es tajante. Para ella, Isabel no es una mujer fría y calculadora como decía. "No vende que se hable bien de Isabel. Tiene un comportamiento impecable, esa es su educación. Isabel es buena persona y siempre ha actuado con muy buena fe", desliza en conversación con este medio.

"El solar de Puerta de Hierro lo pagó íntegramente Isabel Preysler"

Miguel Boyer Isabel Preysler
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Si bien prefiere no desvelar qué bienes fueron los que se quedaron en manos de Isabel Preysler tras la muerte de Boyer en el año 2014, sí nos matiza que la casa de Puerta de Hierro, en la que actualmente vive, jamás fue propiedad de Miguel Boyer. Desmiente que el economista la adquiriera para ponerla a nombre de su esposa y asegura que el dinero para su compra salió en su totalidad del bolsillo de la reina de corazones, lo que justifica que estuviera fuera del reparto. "El solar de Puerta de Hierro lo pagó íntegramente Isabel Preysler, tal y como consta en escritura. Se le puede preguntar al señor Tapias, que aún vive. Menudo era el señor Boyer, como para que hubiera una sola peseta que no constara. Todo se sabe... de dónde salió la cuenta, de dónde venían esos ingresos y era del trabajo de Isabel Preysler. Así se abonó todo lo que costó el solar", apunta a SEMANA la abogada, de Montero Aramburu Abogados, el bufete que representó a Christian Boyer, albacea y hermano de Miguel Boyer. Así mismo, coincide en el relato que dio Laura sobre el reparto del testamento: en efecto, hubo tres lotes. Entre ellos, destacaba un busto de gran valor para la familia que se desconoce a quién fue a parar tras la renuncia de Laura. "Se hizo lo que decía la ley", dice.Sorprendida todavía por la muerte de Laura Boyer, quien falleció a los 57 años por un cáncer el pasado 24 de febrero, la abogada está convencida de que si Laura hubiera pedido ayuda a Isabel, ella le haría tendido su mano. "Isabel siempre se ha portado bien. Ella ayuda sin saber que está ayudando. Ha tenido personas a su servicio que estaban enfermos y les ha acompañado, pagado el tratamiento", mantiene mientras insiste en que la madre de Tamara Falcó siempre ha intentado unir a la familia. La abogada y amiga de Isabel Preysler no quiere dejar de lado tampoco los cuidados que le dedicó a Miguel Boyer después de que sufriera un ictus dos años antes de morir, sobre los cuales Laura Boyer dijo a esta revista: "Ella no le cuidó nada. Le puso un montón de gente para cuidarle, pero ella no le cuidó".

"Cuando Miguel Boyer tuvo el ictus, Isabel Preysler lo dejó todo para cuidarle"

Laura Boyer
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"Es imposible que pudiera bañar a Miguel Boyer y levantarlo a peso. Era una persona que necesitaba cuidados las 24 horas, ¿Cómo no va a contratar a alguien? Todo el mundo, aunque no puede lo hace, aunque sea de la administración...si no es imposible. Cuando Miguel Boyer tuvo el ictus, Isabel Preysler lo dejó todo para cuidarle. Incluso sus clases de yoga, dejó todo y se volcó en los cuidados del que entonces era su marido. No he visto a dos personas que se quisieran más y estuvieran tan enamoradas", cuenta Purificación. El 29 de septiembre de 2014 el exministro falleció en Madrid y, aunque como en todas las familias hubo notas discordantes, la amiga de Isabel quiere matizar que Preysler "le tendió la mano" a Laura Boyer y que "se la trató con cariño" tanto por su parte, como por la del resto de sus hijos: "Ella propiciaba eso". No lograron entenderse, sin embargo, Isabel ahora quiere pasar página y cerrar un capítulo que con la muerte de Laura Boyer inevitablemente se ha vuelto a abrir.