Las últimas semanas no han sido nada fáciles para Isa Pantoja. A mediados del pasado mes de septiembre, la hija de Isabel Pantoja era ingresada de urgencia en un hospital de El Puerto de Santa María a consecuencia de una dolencia en la zona del estómago. Su malestar iba in crescendo, y finalmente los médicos concluyeron en que se trataba de una apendicitis por la que tenía que pasar por quirófano de inmediato. Una operación por la que ahora cuenta con ciertas secuelas que ha compartido con sus seguidores.

Isa Pantoja con ropa de deporte

Isa Pantoja con ropa de deporte.

@isapantojam Instagram

Los "tres agujeritos" que a Isa Pantoja le han quedado tras pasar por quirófano

A través de su cuenta de Instagram, Isa Pantoja ha revelado que, por suerte, ya no tiene puntos: “El procedimiento ha ido superbien y ha sido algo rápido”, ha confesado, justo después de acudir al hospital y de hablar con los médicos sobre su reciente operación de apendicitis. Por suerte, todo ha salido según lo previsto y la hermana de Kiko Rivera puede presumir de apenas contar con cicatrices que sean muy visibles por la intervención: “Apenas tengo marcas. Son tres agujeritos”, ha explicado.

Tan rápida y eficaz ha sido la recuperación de Isa, que ha podido volver al gimnasio para comenzar sus rutinas deportivas con total normalidad. Acompañada por su marido, Asraf Beno, Isa admitía que le estaba costando un poco retomar sus ejercicios, aunque estaba haciendo todo lo posible para que su retorno fuera lo más liviano posible. La hija de la tonadillera es consciente de que, si recupera su forma física, no tendrá que sufrir ninguna otra secuela posterior a la operación. Por ello, está dando lo mejor de sí misma para tonificar su cuerpo cuanto antes. 

Isa Pantoja en un evento

Isa Pantoja en un evento.

Gtres

El comienzo de la pesadilla de la hija de Isabel Pantoja

Era el pasado 12 de septiembre cuando Isa hacía saltar las alarmas a consecuencia de un inconveniente en su estado de salud. Días antes de este suceso, la colaboradora ya había alertado de que estaba padeciendo ciertos dolores que cada vez iban a más: “Ayer mi plan era dar una vuelta, también subir los stories de algunas cositas que me habíais preguntado sobre la casa… Pero resulta que me levanté con un dolor abdominal horroroso (…) Fue a más, me dolía la boca del estómago, el estómago, y luego se me fue a la tripa. Un dolor horroroso. Me asusté un montón porque no sabía qué podía ser. Como no me atrevía a tomarme nada, fui al médico para ver qué me recomendaba”, contaba. 

Lo que no podía llegar a imaginar, es que esa visita a su clínica de confianza desembocaría en una operación inmediata. Aunque en un primer momento se creyó que eran gases, más tarde pudo saberse que Isa padecía una apendicitis: “Me hicieron analíticas y me dijeron que tenía gases. Yo, de verdad, no sabía que dolían tanto, y hoy sigo igual. He dormido muy poco (…) No he podido ir a entrenar, no puedo sentarme bien porque me duele muchísimo, no puedo andar… Lo estoy pasando fatal”.

Teniendo en cuenta que el malestar de la joven no remitía pese al paso del tiempo, los profesionales pertinentes cayeron en la conclusión de que no eran gases, sino algo mucho peor que requería un tratamiento inmediato. Por suerte, todo quedaba en un susto para Isa, que días después pudo recomponerse en su casa junto a su hijo y su marido. 

El otro susto de la hermana de Kiko Rivera en apenas unos meses

Cabe destacar que este no es el único susto que la hija de Isabel Pantoja ha dado, en lo que a su salud se refiere, en este 2024. A comienzos del verano, la colaboradora hacía saltar las alarmas a causa de una bronquitis por la que llegó a temer por su vida. Los médicos le advirtieron de que “tenía una infección en las vías respiratorias”: “Lo he pasado supermal. Ya sabéis que yo vengo arrastrado una bronquitis, y de ahí me dio una crisis de asma hace más o menos tres semanas. Tuve que ir a urgencias y todo porque pensaba que me iba al otro mundo”, señalaba en su cuenta de Instagram.

 

Parte de este empeoramiento vino dado por la reforma que estaba haciendo en su casa, la cual levantó mucho polvo a su alrededor: “Me habéis recomendado llevar mascarilla en casa y lo estoy haciendo. Me siento mejor. En la calle no utilizo, pero ahora estamos recogiendo materiales de construcción y me asfixio (…) Cuando he entrado a algún sitio que había polvo he estornudado, pero vamos, nunca he tenido ningún tipo de alergia. Entonces a mí me sorprendió que me dijeran que había tenido una crisis de asma. El médico me mandó un inhalador y una pastilla, y hasta ahí guay, porque la tos que tengo no es una tos con mocos, sino que tengo una tos seca. Tengo la nariz taponada un poquillo, pero durante el día bien, toso algunas veces, pero ya está”, tranquilizaba. Por suerte, ahora parece que las aguas vuelven a calmarse en su vida.