Si algo está claro, es que la relación entre Isabel Pantoja y sus hijos es nula. La emisión de ‘Cantora: la herencia envenenada’ marcó un antes y un después con Kiko Rivera, pese a haber permanecido unidos durante muchos años. Del mismo modo, la tonadillera fue alejándose de Isa, que en multitud de ocasiones ha dejado claro que le han dolido muchos de los desplantes que le ha hecho su madre como, por ejemplo, su ausencia a su boda con Asraf Beno. Sin embargo, esta situación podría cambiar muy pronto.

Los detalles sobre la docuserie de Isabel Pantoja

Isabel Pantoja con gafas de sol.

Gtres

Así lo ha revelado este mismo domingo, 20 de abril, ‘Socialité’. Y es que, Isabel Pantoja y sus hijos podrían haber dado un paso al frente en su camino hacia la reconciliación. Quien habría manifestado su deseo de acercarse a ellos no es otra que la propia tonadillera, con el objetivo de poner fin a tantos años de rifirrafes: “Nos consta que Isabel Pantoja ha verbalizado este deseo”, han asegurado.

¿Reconciliación a la vista? Isabel Pantoja, dispuesta a acercarse a sus hijos

Según la información que llega al programa, nos consta que, en este 2025, la intención de Isabel es reconciliarse con sus hijos. Es muy fuerte porque llevamos años viendo todo lo contrario, cómo las relaciones se han roto por completo, de declaraciones durísimas por parte de todos, pero la cosa podría estar a punto de cambiar. La intención es importantísima”, ha adelantado una de las reporteras del espacio de los fines de semana de Telecinco.

Isabel Pantoja en el trailer de su anterior documental

Isabel Pantoja en el trailer de su anterior documental.

De esta manera, la actual vida de Isabel Pantoja daría un radical giro de 180 grados. Pese a estar totalmente centrada en sus compromisos profesionales, y tener apoyos como el de Agustín o Anabel, la cantante podría estar echando de menos a sus hijos. Por ello, y después de meditar tan importante decisión personal, le gustaría reencontrarse con Isa y Kiko.

De momento, se desconoce si Isabel verbalizará esta decisión ante sus hijos, o si, por el contrario, se la hará saber a través de algún intermediario. Tal vez opte por esta segunda opción, pues no está claro si Kiko e Isa están dispuestos a escucharla, o prefieren que su situación siga igual que siempre. Sea como fuere, todo apunta a que, dentro de muy poco, podría darse una reconciliación muy sonada dentro del clan Pantoja.

La tonadillera, una madre alejada (pero muy presente) en los momentos importantes de sus hijos

Aunque es cierto que Isabel Pantoja ha permanecido alejada de sus hijos en algunos momentos importantes de su vida, sí que en otros ha seguido estando presente. Por ejemplo, cuando la salud de Kiko Rivera fue azotada por un ictus. En esa terrible situación, la tonadillera dejó atrás sus malos ratos para desplazarse hasta el hospital en el que permanecía ingresado su hijo y brindarle todo su apoyo. Pero ni ese movimiento fue suficiente, pues después, se dio a conocer que madre e hijo no habían conseguido limar asperezas.

No obstante, probablementeuna de las personas más dolidas con la cantante sea su hija. Isa Pantoja ha tenido que lidiar con la ausencia de su madre en los momentos más reseñables de su vida, como su boda o su segundo embarazo. Aun así, a través de distintas intervenciones como colaboradora en ‘Vamos a ver’, ha dejado entrever que se ha terminado acostumbrando a esta ausencia por parte de su progenitora, y que no está dispuesta a ser ella quien dé el primer paso para tender puentes.

De hecho, durante el ingreso hospitalario de la hija de Anabel Pantoja, se produjo un reencuentro entre Isabel y sus hijos. Sin embargo, todos ellos lograron dejar atrás sus diferencias para centrarse en apoyar al nexo de unión de la familia: “Todos hemos hecho lo que teníamos que hacer, que era estar apoyando a Anabel, en mi caso porque entiendo lo que la palabra ‘madre’ significa, y necesitaba estar al lado de ella”, dijo Isa Pantoja en directo.

 

Aun así, no olvida que, cuando ella lo ha pasado mal o ha tenido problemas de salud, su madre no ha estado ahí. Tal y como sucedía cuando era operada en una clínica de Cádiz hace meses, pero en este caso, Isabel Pantoja ni siquiera le llamó para saber cómo se encontraba: “Ni me ha llamado ni me ha querido venir a ver. No ha dado el paso. Igual que sabía perfectamente que no vendría a mi boda con Asraf, aunque muchos me dijeran que a lo mejor sí, en esta ocasión no tenía ninguna duda de que me iba a llamar o que iba a venir a verme. Incluso apostaba más porque viniera, que porque me llamase”, dijo, visiblemente decepcionada con su progenitora, de la que ya no espera nada.